Lundin Gaona Maria Paz MA 2016
Lundin Gaona Maria Paz MA 2016
Lundin Gaona Maria Paz MA 2016
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by
MASTER OF ARTS
University of Victoria
All rights reserved. This thesis may not be reproduced in whole or in part,
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Supervisory Committee
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! iii!
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Abstract
Considering that during the Baroque there was arguably nothing more enigmatic than the
emblematic tradition, this thesis discusses how emblems played a role in the
symbolic imagery. Through the analysis of the poetic, political, and philosophical
functions of the 1680 Neptuno alegórico (Allegorical Neptune), this study discusses the
the most rethorical and multifaceted texts of the humanist writer and Hieronymite nun sor
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Table of Contents
Supervisory Committee.................................................................................................. ii
Abstract........................................................................................................................... iii
Table of Contents............................................................................................................ iv
Acknowledgments........................................................................................................... v
Epigraph.......................................................................................................................... vi
Introducción.................................................................................................................... 1-7
Capítulo III: Luces y sombras ecfrásticas del Imago Dei sorjuanino......................... 61-86
alegórico.................................................................................................................. 115-129
Bibliografía............................................................................................................. 130-139
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! v!
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Acknowledgments
I would first like to thank my supervisor Dr. Beatriz de Alba-Koch, who has encouraged
me through this entire process and has always been sharing wise insights to help me
progress through this investigation. Without her invitation to this Masters Program, and
her academic support, this research would not be possible. I would also like thank Dr.
Pablo Restrepo-Gautier for his commentaries, suggestions, and revisions, and the
Secretary of the Department, Donna Fleming, for her guidance during these two years of
studies at UVIC. Finally, I thank my husband, Timothy Bassett, who has helped me
spiritually and materially in order to live in Victoria B.C., which has been one of the most
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! vi!
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Epigraph
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"El!Neptuno(alegórico,!documento!barroco!por!
excelencia,!no!sólo!es!muestra!palpable!de!la!
alteración!y!conmoción!de!valores!de!la!época!
(...)puesto!que!la!autora!es!una!mujer!intelectual!
y,!por!tanto,!la!que!introduce!un!tono!disonante!
dentro!de!la!sociedad!de!su!tiempo,!sino!porque!
muestra!que!es!maestra!excelente!en!el!manejo!
del!ropaje!lingüístico!y!conceptista!de!los!sabios!
de!su!época.”!(Sabat!de!Rivers,!"El Neptuno de
Sor Juana, fiesta barroca y programa político" 248)!
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INTRODUCCIÓN
Como sabemos el Neptuno alegórico (1680) de sor Juana Inés de la Cruz es una
del ingenio y lo imaginario, tratando de establecer el lazo que construyera no sólo una
identidad, sino también una memoria simbólica del mundo –que en sí mismo contenía el
simbologías que van más allá de lo cristiano, de lo criollo o de lo hispano. Sor Juana
inscribe en su texto reflexiones filosóficas y de género que nos brindan un nuevo campo
de estudio del Neptuno alegórico, el cual proponemos como "arte poética" y obra umbral
por medio de la cual la monja expone sus primeras exploraciones filosóficas en torno a la
escritura y al conocimiento.
Muchos críticos han apuntado que en el Neptuno sor Juana intenta construir
de qué? Ésta ha sido la pregunta base que nos ha movido a realizar esta investigación y la
que nos proponemos, si no a responder, al menos a hechar luces nuevas que guíen mejor
! 1!
En este intento por iluminar o aclarar las lecturas críticas sobre el Neptuno, nos
veces la tarea de trazar puentes que las unan. Aún así, los diversos aportes a su estudio,
realizados por Electa Arenal, Verónica Grossi, José Pascual Buxó, Sagrario López,
Georgina Sabat de Rivers, Julie Bokser y Nelson Bradley, entre otros, han permitido
aspectos del arte simbólico del emblema con el relato ecfrástico para la descripción de
imágenes. Sor Juana expone aquí o manifiesta con ello las necesidades de un sujeto de la
subjetividad barroca, subvirtiendo formas retóricas y los discursos con los cuales los
menos los avances de investigación en cuanto a temas de género, ya que creemos que
todos estos aportes han sido muy esclarecedores en su conjunto de una obra poco
abordada en contraste al resto del corpus sorjuanino. Algunas de las preguntas que han
medio del entramado de alegorías y citas de la tradición clásica? y, ¿cuáles de ellas son
piezas fundamentales dentro del catálogo sorjuanino?, por último, ¿qué elementos
! 2!
Más allá de una obra por encargo el Neptuno alegórico (1680) nos permite
cual, hemos considerado importante realizar una lectura de los fenómenos socio-
encomienda del arco triunfal por parte del cabildo metropolitano y la tradición
arquitectónica efímera que influye como telón de fondo cultural para la comprensión de
las descripciones pictórico-simbólicas que utiliza sor Juana en su diseño para el arco. Por
otro lado, muy consciente en cuanto a las complejidades que pueda presentar la crítica
obra–– acogemos con rigurosidad las tesis más pertinentes para este estudio, evitando
colaborar en los estudios del corpus sorjuanino desde un ánimo unificador entre las
tesis nos han permitido esclarecer los conocimientos mitológicos y retóricos utilizados de
forma ostentosa y única en comparación con el resto de sus obras. Además, en el Neptuno
se presenta a sor Juana como la primera mujer escritora que se atreve a dar consejos
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
1!Dicho enfoque postmoderno resulta descontextualizado, o si se quiere fragmentario a modo de
"patchwork ideológico," como señala Julia Lewandowska en su artículo: "Sor Juana Inés de la Cruz y la
crítica feminista" (43-4). Por otro lado, autoras como Iris Zavala proponen una re-escritura del pasado
como escritura pura, según las concepciones postmodernas del lenguaje que interpretan los textos como
“discurso de la obsesión a partir de señales como las metáforas” (220-1). Concordamos con Lewandowska
entonces en que estas teorías, aunque interesantes, se aplicarían con un sentido ahistórico intentando un
sentido universal.!
! 3!
políticos para un virrey desde el claustro. Por último, el texto expone alusiones e
red de subtextos, donde nos presenta a personajes femeninos que resaltan por sus virtudes
relativas al logos, como el caso de la diosa egipcia Isis que sor Juana inserta a lo largo de
escritora, revisamos algunos eventos claves de su vida, los que ayudan a entender mejor
sujeto capaz de realizar conexiones, dar sentidos, leer símbolos y crear alegorías del
mundo. Y sor Juana como sujeto barroco defiende esa capacidad intelectual en su
indiscutible rol de sabia. Vemos además cómo sor Juana logra un particular sincretismo
producción del texto y la edificación del arco triunfal, revisaremos en el Capítulo II.- El
efímero arco y su cristalización, los principales aspectos sobre el arte de los arcos
! 4!
esta primera revisión del texto con el motivo de definir los aspectos políticos que se
literatura ecfrástica, ofreceremos reflexiones sobre las bases teóricas y las técnicas que
sor Juana utiliza en su Neptuno para subvertir las restricciones sociales que la
Luces y sombras ecfrásticas del Imago Dei sorjuanino, vemos por un lado, cómo a
imágenes, de manera tal que los conceptos fueran representados "con el buril y con la
pluma" (Saavedra Fajardo, a3). Del mismo modo, sor Juana "dibuja" y "delinea" el
argumento del arco triunfal dedicado al octavo décimo virrey de México, estableciendo
puentes teóricos con la literatura emblemática y la literatura ecfrástica del Siglo de Oro.
del saber, se analizan de forma exclusiva los elementos mitolgógicos que argumentaron
dos lienzos del arco y los aspectos simbólicos que decoraron uno de los jeroglíficos de las
elementos nuevos en el mito y cómo propone con ingenio en sus redondillas para los
aspectos filosóficos que dialogan con obras posteriores como el Divino Narciso (1689) y
el Primero Sueño (1692). Concordamos con Verónica Grossi y Electa Arenal quienes
! 5!
afirman que el lenguaje cifrado (político y retórico) recorre la obra de sor Juana como
las intepretaciones desde los estudios de género, según los cuales sor Juana edificaría un
fondo cultural que explicaría las selecciones y gustos eruditos de la monja, así como sus
barroco que por medio de agudezas retóricas buscó expandir la posibilidad de sentidos e
interpretaciones de una tradición que ya antes había intentado unificar reflexiones entre lo
pagano y lo ortodoxo. En este sentido, el gran aporte de sor Juana fue el crear una red
autoridad heterodoxa a través de sutiles pero frecuentes referencias que ella hace a los
textos paganos, neoplatóticos y gnósticos. Por otro lado, estos sincretismos ofrecieron un
espacio retórico en el cual ella teoriza sobre mitología, filosofía y escritura desde una
perspectiva de género. Dibujando con su mente un arco que, si bien se erigió para un
virrey, termina alabando las cualidades femeninas de una sabiduría antigua que se
proyectan como espejos claroscuros en las menciones que hace a la virreina, personaje
crucial para el desarrollo intelectual de sor Juana durante los años de protección que le
! 6!
esclarecer el discurso mitológico de las divinidades femeninas que sor Juana rescata y
comprender el rol que ella otorga a las diosas antiguas en el mito de Neptuno. Sor Juana
termina tapizando el arco de puentes entre una enigmática referencia a un pasado remoto
y una representación de lo femenino como ella lo concibe en sus días. Esto demuestra una
de un texto que muchos críticos han despreciado por su cualidad de discurso panegérico,
retórica que tomaría acción por primera vez, a tal escala pública, por medio de la escritura
del arco: ‘[I]indeed, sor Juana has become an acknowledged figure in the rethorical
anthologies. We are now poised to move beyond...to examine her other work, and to
acknowledge its political and rethorical complexity" (Bokser 145). De este modo,
colonia, sino más bien el discurso sorjuanino que articula una voz de sabiduría metafísica
única y compleja, y que delinearía el cuerpo del arco triunfal como el corpus de la obra
con que se ha enfatizado la revisión y estudio del Neptuno alegórico, simulacro político,
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! 7!
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Capítulo I
Más allá de la corte y el claustro de sor Juana:
biblioteca y memoria simbólica
creatividad de sor Juana Inés de la Cruz (1648-1695) como escritora oficial de Nueva
poder. Este proceso dio como resultado una escritura debatida entre los intereses de la
Además del muy utilizado corpus biográfico sobre sor Juana ofrecido por la
crítica estadounidense Dorothy Schons se encuentra el libro de Octavio Paz, Sor Juana o
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
2!Ver el estudio realizado por diversos críticos y autores y compilado en: La creatividad femenina en el
mundo barroco hispánico. !
3 Y los propios intereses de sor Juana que no se conformaban ni a los de la Iglesia ni a los de la corte.!
! 8!
suman otros y otras sorjuanistas (Georgina Sabat de Rivers, Electa Arenal, Antonio
Alatorre, José Pascual Buxó, Stephanie Merrim, Rosa Perelmuter), quienes han dedicado
primera vez –y de forma pública– a partir de su diseño para el arco triunfal y efímero que
nos incumbe.
concordamos con Merrim en que este análisis debe ser matizado con los estudios
feministas, los que han permitido reevaluar el contexto de los claustros y señalar de un
modo más pertinente los factores que habrían motivado a sor Juana en su búsqueda
solitaria del conocimiento a través del encierro. Merrim enfatiza en su estudio la imagen
de sor Juana como mujer escritora, y no únicamente como mujer (13). En este sentido,
escritural de sor Juana y sus aportes a las letras hispánicas: 1º) Sor Juana defiende los
! 9!
2º) Sor Juana buscó la eliminación de la diferencia (femenina), apropiándose de los
continuum; 3º) Sor Juana al escribir para la clase gobernante habría también implicado
hacer uso de su derecho como mujer de escribir en ese mundo de hombres (Merrim 14-
15).
Teresa, [sor Juana] debe haber sido más soñadora que aventurera, y más reflexiva que
soñadora" (108). Y es que, justamente, por ese aspecto retraído y reservado de su carácter
no contamos con mucha información sobre las relaciones que guardaba con sus
familiares, lo único que sabemos con certeza es que su familia materna era criolla.
hermano (Paz 100). Sus abuelos maternos, Pedro Ramírez de Santillana y Beatriz
Rendón, eran de origen andaluz y venían de Sanlúcar de Barrameda. Pedro Ramírez era
biblioteca de su abuelo materno, Pedro Ramírez quien –según Paz– sustituiría la imagen
paterna de su padre biológico, Pedro Manuel de Asbaje "caballero viscaíno" (Paz 97),
Asbaje, mujer en medio de una sociedad altamente misógena, era hija natural de una
criolla y de un español.
! 10!
Amante de la lectura y de la escritura, el escenario que le tocó vivir a Juana Inés
Ramírez de Asbaje desde pequeña le fue más bien hostil considerando además el hecho
de que no tuvo acceso a una dote, factor que hacía más difícil su posicionamiento social
que la jerarquizada sociedad novohispana del siglo XVII se consolidó a través de una
división entre los españoles peninsulares y los criollos, aunque ambos ocupban la cúspide
social. A mediados del siglo XVI se había empezado a usar el término "criollo." El
problema que enfrentaron muchos criollos fue precisamente dicha diferenciación respecto
a los poderes metropolitanos y las espectativas frustradas en cuanto a formar parte de una
aristocracia que se veía amenazada y controlada por las fuerzas metropolitanas, como la
comitiva del virrey. Tal como lo indica David Brading, las comitivas virreinales eran
extensive entourage of relatives and clients whom he installed in public office, appointing
his favourites as district magistrates without regard for the long-standing creole clamour
for such posts" (294). De este modo, y tal como lo explica Brading, el gobierno y la
riqueza de Nueva España fueron rápidamente usados por aquellos grupos de españoles
más que por los hijos de conquistadores nacidos en México, pasando a ser los criollos una
their own country" (313). Sin embargo, el amor por el conocimiento y las letras
funcionaría como una fuerza reparadora social para sor Juana dentro de esa compleja
estructura de castas, ya que, aún siendo criolla y mujer ella logró conquistar los circuitos
virreinales del poder. Es más, y como veremos en el próximo capítulo, sor Juana
! 11!
recomienda al virrey adoptar medidas sobre este punto en particular, incorporando a
La biblioteca del abuelo pasa a ser el mundo de la pequeña Juana Inés. De este
ella heredaría uno de los pocos ejemplares de poesía latina que se encontraban en ese
entonces en México, se trataba de una antología editada en Lyon (1590) y que contenía
Tibulo, entre otros (Paz 116). Suponemos, entonces, que desde muy pequeña la escritora
por la cultura y las letras la habrían motivado desde pequeña y habrían transformado su
mundo en un conjunto de signos con los cuales ella pudo modificar su realidad a pesar de
los obstáculos sociales. Los signos substituyeron a las cosas y la biblioteca pasa a ser un
lugar estable. Templo y refugio desde donde ella crea, proyecta y conecta ideas y
realidad, desde entonces Juana Inés "vivió en un mundo de signos y ella misma, se
convierte más y más en un signo" (Paz 117).4 En el mundo creado a partir de la biblioteca
alegorizante y alegorizado por la ingeniosa Juana Inés, quien encuentra en ese espacio un
mundo de divinidades a las cuales honrar con metáforas y a partir de las cuales contar
otra historia, un mito diferenciado. Las Diosas que presenta como caleidoscopios
fantasmales de una sabiduría antigua son aquellas en las que Juana Inés proyecta sus
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
4!Sor Juana, según el escritor mexicano, es una proyección del conocimiento femenino que emana de la
divinidad egipcia Isis. Paz dedica un capítulo completo de su libro al tema: "La madre Juana y la diosa Isis"
(229-44).
!
! 12!
ideas y se proyecta. Así, el mundo simbólico sorjuanino edifica una retórica más política
que poética, a partir de la cual ella examina genealogías y fábulas con las cuales
posicionar a lo femenino como elemento sustancial del conocimiento, tema que veremos
Después de vivir con los abuelos maternos, sor Juana fue enviada a la casa de
unos tíos, conocidos como los Mata, en la ciudad de México. Creemos, tal como lo ha
indicado Sabat de Rivers, que la estadía en la casa de sus tíos, propiciada por el abuelo y
de conocimiento y que sin duda– dicha experiencia "le abrió todo un mundo nuevo" ("Sor
Juana" 625). Sobre su estadía en la casa de sus adinerados tíos, su primer biógrafo –el
Padre Diego Calleja– explica que la fama de la joven Juana Inés como erudita maduraría
durante esos años, en los que ella habría recibido lecciones de latín, entre otras materias.5
Basta recordar a la misma sor Juana quien explica su precoz motivación por el mundo
académico:
Teniendo yo después como seis años o siete años, y sabiendo ya leer y escribir,
con todas las habilidades, de labores y costuras que desprenden de las mujeres, oí
decir que había Universidad y Escuelas en que se estudiaban las ciencias, en
Méjico; y apenas lo oí cuando empecé a matar a mi madre con instantes e
importunos ruegos sobre que, mudándome el traje, me enviase a Méjico, en casa
de unos deudos que tenía, para estudiar y cursar la Universidad. (446)
Más tarde, en 1664, gracias a las conexiones de la misma familia, Juana Inés
habría sido aceptada en el palacio de los virreyes de Mancera, Antonio Sebastián Álvarez
de Toledo Molina y Salazar y Leonor Carreto. Mancera gobernó entre los años 1664 y
1673. Así, a sus quince años, se convierte en dama de la corte. Este ambiente cultural sin
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
5
Aunque no se sabe con certeza la edad exacta con la que Juan Inés viaja a la ciudad de México, creemos
que es cerca de haber cumplido sus trece años. Para mayor información véase la Biografía de Sor Juana
Inés de la Cruz de Georgina Sabat de Rivers. Ver en página 625, nota al pie número12.
! 13!
duda le fue favorable, pudiendo continuar y ampliar su apasionado deseo intelectual, tal
diversas cosas, sin tener para alguna particular inclinación, sino para todas en general"
(Cruz, Obras completas 449). Concordamos además con Paz cuando advierte que los
Mata habrían puesto en contacto a la joven con los virreyes de Mancera, no porque
improbable en el caso de Juana Inés al no poseer ninguna dote y además porque ella
nunca lo deseó. Insistimos entonces en la idea de que su inteligencia y saber fueron las
llaves que le abrieron las puertas al mundo de la corte virreinal y fueron la razón por la
que los Mata la habrían ayudado a obtener una educación humanista y cortesana. Estos
hechos cobran mayor sentido si tomamos en cuenta el extraordinario manejo del arte
artistas difícilmente podían acceder.6 Esto se debe mayormente al gran prejuicio que
sufrieron las mujeres letradas que debieron batallar a base de retóricas ajedrecísticas y
sutiles estrategemas con tal de lograr el anhelado desarrollo intelectual. Siguiendo las
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6!Aunque sí había mujeres en la corte, como damas de compañía de la reina o virreina; de todos modos,
había pocas mujeres artistas.!
! 14!
ideas de Sabat de Rivers sobre la relevancia de las mujeres nobles que rodearon a sor
Juana,7 concordamos con que las virreinas fueron clave para el desarrollo intelectual de
Juana Inés:
No sería extraño, que la autora –quien desde niña sintió verdadera pasión por el
estudio– se sintiera a gusto y compartiera su saber con tales mujeres, ya que eran
ellas las que con más facilidad podían darse cuenta del valor de su inteligencia y
de sus conocimientos; fueron ellas también las que -después de la segura ayuda
inicial de las mujeres de su familia- le tendieron la mano en aras de
reconocimiento femenino solidario, y dieron a conocer su nombre más allá de los
muros del palacio y el convento. (Sabat de Rivers, s.n)
Será este periodo en la corte el que abrirá una nueva biblioteca a la joven Juana
Inés, una biblioteca compuesta de libros de poesía y música. A pesar de que sor Juana
conocía bien la poesía de Petrarca, ésta no fue la principal fuente para su confección de
sonetos cortesanos. Tal como señala Sabat de Rivers en sus estudios biográficos sobre la
monja, tenemos que considerar a la Décima Musa como una de las últimas herederas
Sin duda, sor Juana heredó la maestría poética de los poetas españoles entrenados en el
entonces popular estilo italiano del endecasílabo. Sin embargo, también podemos notar la
originalidad con la que la monja adopta el arte de la imitatio con la que llega hasta a
La poesía era considerada en la época de sor Juana uno de los géneros más altos
del mundo intelectual, debido a su funcionalidad clave para cualquier evento aristocrático
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
7 Me refiero al artículo publicado en Cervantes Biblioteca Virtual « Mujeres nobles del entorno de sor
Juana ». Web. 2005.!
! 15!
triunfales o piras funerarias. La colonia era entonces muy atenta a las formas de escribir
que se utilizaban en España, por lo que las novedades poéticas fueron adaptadas con
premura por parte de los escritores criollos quienes no querían quedar atrás en dichas
modas y estilos. Sor juana como escritora criolla tampoco se quedó sin adaptar las formas
poéticas impuestas por la tradición, ya que era una forma más de ganarse un lugar oficial
dentro de la colonia, por lo que aprovechó todas las instancias que se le presentaron para
palacio se celebraron con frecuencia muchos saraos, festejos y ceremonias, rituales en los
que sor Juana como dama de corte participó escribiendo textos para ser cantados o
vida en la corte, no extendió su estadía por mucho tiempo, y en 1667, apadrinada por los
mismos virreyes de Mancera, Juana Inés a los diecinueve años entra a la orden de las
esferas de desarrollo intelectual y creativo durante el siglo XVII y las formas en que éstas
fueron reprimidas por hombres. Una de las formas en que se evidencia mejor el control
! 16!
mujer ya sea en la casa (el matriminio) o en el convento (la vida religiosa). Sin embargo,
y como bien señala Marry Elizabeth Perry se produce un fenómeno paradójico en este
enclaustramiento, ya que muchas veces los mismos conventos fueron espacios que
misógena.8 Acerca de estas prácticas conventuales habría que destacar que: "[T]hey could
[the nuns] excercise authority and teach other women [...] they could strike up friendly
relationships with clerics and confessors –the latter, in fact, were often influenced by
charismatic nuns who propounded affective and visionary spirituality" (Pérez Romero 51-
2). Si tomamos en cuenta estas características del ambiente conventual podríamos aceptar
la idea que para muchas mujeres también este espacio se presentaba como una vía para el
muchas monjas destacaron por su influencia y por ser promotoras de reformas como santa
Teresa de Ávila,9 mujeres que jugaron un rol bastante significativo durante el siglo XVI:
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
8
Según la misma Marry Elizabeth Perry, muchas mujeres sobrevivieron las restricciones de género durante
la Contrareforma española, "some by conforming to gender prescriptions, internalazing the lessons of
dutiful daughters. Some governed themselves in convents and beaterios, establishing female communities
and preserving a sense of freedom even within nuns, beatas [...] But even in conformity, women found a
way to push against gender restrictions. [...]Teresa´s first abbess of the Reformed Carmelita convent in
Seville had to pay the price of many months in solitary confinement for defying authorities, but in the end
she regained her position and even more confidence in her freedom within the cloister" (178).
9!El movimiento de las beatas en España es un ejemplo de esto y fue quizás un movimiento femenino sin
precedentes. Estas mujeres podían ser contemplativas, místicas, visionarias, profetas y hasta consejeras
espirituales, lo que significó en muchos casos un peligro para quienes querían mantener intactos los dogmas
de la Iglesia. Tal es el caso de Isabel de la Cruz fue mística y fundadora junto con otros protestantes de
Castilla del grupo Alumbrados, que fue perseguido por la Inquisición española en 1525, es decir, antes de
que se publicara en España la obra del alemán Martín Lutero (1527). Otro ejemplo, es el de Francisca
Hernández a quien muchos monjes franciscanos como Francisco Ortiz recurrieron a su conocimiento
místico. La misionera Francisca Hernández formó parte del movimiento erasmista de Alcalá y fue acusada
de herejía por el tribunal Inquisitorio de Toledo en 1529. La persecusión o represión a las beatas se debía
principalmente por ser promotoras de esa nueva religiosidad influenciada por ideas protestantes o luteranas,
que proponían –entre muchas otras cosas– reincentivar la fe a través de la la vía mística y la revelación. Ver
más en: Pérez Romero. Este grupo de mujeres influyentes significaron para la época una transgresión que
debía de ser regulada. De algún modo al acercarnos a la historia de las beatas españolas, mujeres
visionarias y reformistas, entendemos la amenaza que habrá significado una presencia como la de sor Juana
! 17!
"They became not only adherents and followers of the era’s renewal movements; they
also became charismatic leaders, seers, and mystics with influence over men –and over
new spirituality itself" (Perez Romero 50). Si bien sería aventurado en este trabajo
argumentar el compromiso místico de sor Juana con dicha "nueva espiritualidad" de sus
después y de modo muy conciente perpetúa ese mismo espíritu crítico femenino que
se quiere protofeminista– que hizo ruido en medio de aquel ambiente misógeno colonial.
Un ruido tan fuerte que ni su etapa final de silencio pudo sosegar la influencia y
reconocimiento que hoy en día tiene su obra en las letras y pensamiento filosófico
hispanoamericano.
Schons nos explica cómo de modo similar la sociedad de Nueva España interpretó el rol
de la mujer como asunto "privado" por parte de las instituciones del poder. Así, la
construcción de conventos y casas de refugio para mujeres por parte de la Iglesia fue
crucial y estratégico: "The Bishop of Puebla, Manuel Fernández de Santa Cruz built a
number of such recogimientos in his diocese, but they would not accomodate all the
femenino, nos cuenta Schons, los colegios de vírgenes fueron también muy relevantes, ya
que era donde se protegía a las mujeres en mayor peligro. Se llegaron a construir
recogimientos que acogían a más de 600 mujeres según el jesuita Luis de San Vitores
(Schons 42). Por ello, la decisión de entrar al convento por parte de sor Juana radica en la
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para los directores religiosos novohispanos, ya que sin duda éstos no podían ignorar el poder que podía
llegar a ejercer una monja dentro de una orden religiosa.
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! 18!
inestable protección que ponía en peligro su posición en la corte: “It was, undoubtedly,
necessary for her to retire from public life at court. There was no recogimiento where she
might live until she could decide definetely on her future occupation. She was, therefore,
practically forced to choose convent life, or be at the mercy of the world” (Schons 45).
Comprendemos, entonces, las pocas posibilidades que tenía Juana Inés de desarrollarse
como intelectual siendo mujer en aquella época y cómo el convento le ofreció un espacio
seguro para satisfacer dichas ansias de saber.10 Muchos de los estudios que se ocupan de
sus aspectos biográficos abordan la pasión erudita, científica y enciclopédica con que sor
Juana superó las barreras de los prejuicios y se defendió frente a la arrogancia misógena
con que se discriminaba a las mujeres letradas de la época. A su entrada a las Carmelitas,
no pasaron más de tres meses cuando tuvo que retirarse debido al extremo rigor de la
estuidosos han atribuido dicho giro –de la corte al claustro– a supuestos desengaños
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
10
Asunción Lavrin nos ofrece en su ensayo "Unlike sor Juana? The Model Nun in the Religious Literature
of Colonial Mexico" nuevos matices y perspectivas que ayudarían a reconstruir las dimensiones esenciales
del mundo sorjuanino a partir del entorno del convento en la colonia. Ver en Femenist Perspectives.
11 Para mayores detalles sobre la vida en el monasterio de San Jerónimo, véase el estudio realizado por
María Concepción Amerlinck de Corsi. Ver en Sor Juana y su mundo: una mirada actual.!
! 19!
amorosos o al descubrimiento de su condición de hija natural,12 preferimos ajustarnos a
las mismas palabras de sor Juana, quien explica muy bien su decisión:
Entréme a religiosa, porque aunque conocía que tenía el estado cosas (de las
accesorias hablo, no de las formales), muchas repugnantes a mi genio, con todo,
para total negación que tenía al matrimonio, era lo menos desproporcionado y lo
más decente que podía elegir en materia de la seguridad que deseaba de mi
salvación; a cuyo primer respeto (como al fin el más importante) cedieron y
sujetaron la cerviz todas las impertinencillas de mi genio, que eran de querer vivir
sola; de no querer tener ocupación obligatoria que embarazase la libertad de mi
estudio, ni rumor de comunidad que impidiese el sosegado silencio de mis libros.
(446)
Ella siempre fue enfática en cuanto a no querer ser la mujer de nadie, buscando siempre
Por otro lado, sabemos también que el barroco fue el modelo creador a partir del
cual sor Juana se expresó y reflexionó, y lo que la llevó a esa apasionante búsqueda
intelectual, pero ¿cuáles fueron las motivaciones intelectuales que movieron a sor Juana a
establecer relaciones con el afán de experimentar? Recordemos lo que ella misma nos
impreso e independiente de su causa, pues distante la mano de la niña, que era la causa
poesía. Es una aspiración casi científica que la incita a originales conjeturas: ella quiere
saber si ese impulso sobre el objeto forma figuras perfectas como los círculos, sin
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
12!Las hijas naturales son hijas de padres que no se han casado pero que conforman un hogar. Las ilegítimas
tienen un o ambos progenitores casados con otra persona.!
! 20!
embargo, se encuentra con un repliegue espiráldico del movimiento, un ensimismamiento
que terminaría trazando formas igualmente perfectas, pero diferentes. Continúa así la
reflexión de sor Juana: "[Y] no contenta con esto hice traer harina y cernerla para que, en
bailando el trompo encima, se conociese si eran círculos perfectos o no los que describía
su movimiento; y hallé que no eran sino unas líneas espirales que iban perdiendo lo
líneas perfectas al experimentar con el trompo al igual como lo hace con su escritura,
inscribiendo en sus textos un particular impulso, un impulso casi motivado por algo
superior a ella: "[F]ue tan vehemente y poderosa la inclinación a las letras, que ni apenas
represiones han bastado para que deje de seguir ese natural impulso que Dios puso en mí"
(412). Impulso que también entendemos como deseo de dejar en el papel un vestigio del
sujeto-Juana Inés tejido como un signo más dentro de un corpus de referencias literarias
Sobre este mismo punto, y más allá de recordar la conocida tesis de José Antonio
Maravall en La cultura del Barroco sobre el barroco como un instrumento para lograr
efectos, proponemos más bien centrarnos en los efectos barrocos en sor Juana. Es decir,
nos centraremos en los efectos que modelaron su selección, estilo y criterios retóricos, y
donde pudo– .
! 21!
Sor Juana dejó mucho que decir en secreto, uno de esos temas fue lo relativo a sus
retóricos-lógicos, los que la monja utiliza como base de entendimiento para el resto de las
materias:
Con esto proseguí, dirigiendo siempre, como he dicho, los pasos de mi estudio a
la cumbre de la Sagrada Teología; pareciéndome preciso, para llegar a ella, subir
por los escalones de las ciencias y artes humanas; porque ¿cómo entenderá el
estilo de la Reina de las Ciencias quien no sabe el de la ancillas? ¿Cómo sin
Lógica sabría yo los métodos generales y particulares con que está escrita la
Sagrada Escritura? ¿Cómo sin Retórica entendería sus figuras, tropos y
locuciones? (447. Énfasis mío.)
grecolatina. A esto se suma el lenguaje y la retórica neotomista que tenía como eje la
devoción a la piedad y cierta fe en los milagros, sor Juana siempre buscó una manera de
sacar provecho de esa cultura dual en la que se encontraba inmersa.13 Ese saber doble le
creemos que en mucho gracias a sor Juana la cultura mexicana de entonces tuvo una
Tomando en cuenta el impacto que habrían tenido los tres tomos de Oedipus
Aegyptiacus (1652-1654) de Anastasio Kircher en sor Juana, haremos énfasis en que éste
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
13
Elías Trabulse citado repetidas veces por Pascual Buxó ofrece un análisis sobre este tema en su ensayo
"El hermetismo de Sor Juana Inés de la Cruz". En este ensayo Trabulse explica la paradoja entre el
conocimiento científico y la causa divina del mismo, según esto tanto para sor Juana como para los
científicos de su época el papel de la ciencia era sintonizar con el Universo, es decir, un cosmos cuajado
por las maravillas de ese gran mago que era Dios, el verdadero arquitecto del mundo. También revisar el
trabajo de Marie Cécile Bénassy Berling "Sobre el hermetismo de Sor Juana Inés de la Cruz". Ver en
Aproximaciones a sor Juana.
! 22!
acumula información sobre distintas civilizaciones y religiones y en el que hace una
Imaginemos, ahora, a sor Juana enfrentándose a las ideas de Kircher, investigando sobre
los mitos de la Antigüedad Clásica en libros que aparecen como referencia en el Neptuno,
aquellos tratados de mitología que como bien señala Paz "formaban parte de la biblioteca
Natalis Comes (Natal Conti); la Emblemata Liber de Andrea Alciato. Valeriano era una
gran autoridad en los temas sobre jeroglífica y alegoría, pero sobre todo en temas
alegórico muestra a una sor Juana en la que no muchos biógrafos han dado énfasis, una
referencias mitológicas, por lo que coincidimos con Paz!en que este texto es:
educación de los criollos en Nueva España. Los jesuitas además de ser sus maestros
fueron sus voceros, fueron también "su conciencia" (Paz 57). De este modo las
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
14!Otrainfluencia importante es la de los escritores herméticos alemanes como Caspar Schott y Anastasio
Kircher "quienes propugnaron una ciencia basada en la combinación matemática la Ars Magna Sciendi"
(Buxó, Lectura Barroca 92) y el innegable influjo de otro jesuita, el español Sebastián Izquierdo, que ya se
había anticipado en el intento de adaptar la lógica aristotélica-tomista. !
! 23!
cultura de la comunidad letrada novohispana. Sor Juana es un buen ejemplo de ese
Antonio Núñez de Miranda, y que a pesar de sus posteriores rivalidades fue una figura
clave en el desarrollo intelectual de sor Juana: "El la animó a que tomase los hábitos,
diciéndole que allá [en el convento] podía, sin perjuicio de sus obligaciones religiosas,
continuar con sus estudios" (Paz 541). Concordamos con Paz en que poco a poco Núñez
de Miranda habría cambiado su relación con sor Juana. De blando a severo, el confesor
habría aprovechado la oposición del estudio (razón) con la vida religiosa (fe) que dividía
este capítulo nos interesa desentrañar los sincretismos jesuitas que se permearon con
imaginación con la que muchos escritores del siglo XVII terminaron romanizando a
México-Tenochtitlán (Paz 57). Este es uno de los sincretismos que vemos como telón de
fondo para la creación de arcos triunfales en Nueva España, lo que sor Juana aplicará al
diseño de su propio arco. Creemos importante entonces catalogar los tipos de corpus
literarios y filosóficos que influenciarán los argumentos del Neptuno, apuntando todos a
i. Corpus científico: la ciencia del siglo XVII que apasionaba a sor Juana no era una
ciencia divorciada de toda base teológica. La ciencia renacentista tenía más relación con
! 24!
magia y esoterismo que con el pensamiento matemático-racional. Lo que hacen los
propósito de comprender el universo. La ciencia que amaba sor Juana devenía del
hermetismo y con propósito casi místico intentaba comprender las relaciones entre el
En su estudio Ciencia y religión en el Siglo XVII, Elías Trabulse afirma que sor
Juana y Singüenza son las figuras del barroco hispanoamericano que mejor representan el
ciencias ocultas, que tanto afectaron a los escritores barrocos (96-189). Trabulse explica
que la ciencia moderna está endeudada con la religión y en particular con el hermetismo
neoplatónico. Una ciencia moderna que nace de ese claroscuro barroco en el que
ii. Corpus religioso: ningún humanista novohispano se mostró poco curioso sobre las
teorías de revelación progesiva y universalismo jesuita. Tal como indica Paz, "la política
de los jesuitas en Nueva España no era sino parte de su estrategia general en otras
regiones del mundo [...] El núcleo espiritual e intelectual de esta estrategia era una visión
sobrenatural" (56).
través del cual se defendió una jerarquía social. Según esta teoría la sociedad no puede
ser vista como un conjunto de átomos desorganizados, sino más bien como una
! 25!
asociación de subsociedades y subgrupos. Por lo tanto, "la jerarquía no es un producto del
contrato social, más bien pertenecería al orden del universo y de la naturaleza" (Paz 49),
de ahí la necesidad de sor Juana como de muchos sabios en crear alegorías del mundo.
iii. Corpus poético: como decíamos más atrás, el primer incentivo intelectual que
experimentó sor Juana fue a temprana edad a través de la biblioteca del abuelo, la cual
abundaba más en ficción, romance grecolatino y poesía española que en ciencia. Quizás
sea desde ese primer encuentro literario que sor Juana se obsesione con reflexiones
estéticas sobre la copia y el original, lo verosímil y lo fabuloso. De este modo, sor Juana
agregando algo más a esa copia desengañada del original. Tal como indica Paz, “en sor
Juana la función de los espejos es, a un tiempo retórica y simbólica. La estética de los
espejos es para ella también una filosofía y una moral. [...] En un segundo momento, la
imagen del espejo se transforma en objeto de conocimiento. [...] Un saber que es, para la
representación del original, imagen y copia, los que sor Juana utiliza para la reescritura
del mito de en su arco triunfal.15 Si bien analizaremos esto en detalle en el Capítulo III, es
importante aquí hacer un paréntesis sobre el origen de dicha influencia intelectual en sor
Juana. Sobre estos conceptos habría que considerar las observaciones que el padre Calleja
hace sobre la obra de la monja y que nos sirven para tener en cuenta las lecturas que la
habrían motivado durante sus años de estudio y escritura en el monasterio. Habría que
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
15
En el caso del Barroco hispano habrían dos modelos mitopoéticos relevantes: i) el modelo del viaje astral
del jesuita alemán Anastasio Kircher presentado en su libro Iter Extaticum (1671); ii) el modelo de sutilezas
y correlaciones de Baltasar Gracián, que al comprenderlo se comprendería la realidad material bajo cifra.
! 26!
considerar como texto clave la concepción del discurso alegórico que subyace en Los
diálogos de amor (1541) del poeta italiano neoplatónico León Hebreo. Los poetas
antiguos, decía Hebreo en el segundo de sus diálogos de Filón y Sofía, "enredaron en sus
poesías no una sola, sino muchas intenciones, las cuales llaman sentidos" (25). El primer
sentido es el que llamamos "sentido literal," que como corteza exterior de la fábula, da
sentido moral deducible de la historia y aplicable a la vida activa de los hombres, pero
luego, debajo de las propias palabras es que se manifiestan los primeros y más evidentes
encierran no sólo ciertas acciones dignas de memoria, sino otros sentidos que son como
las médulas que la fruta encierra en su corteza, y estos sentidos intrínsecos son
precisamente los que reciben el nombre de alegóricos. De este modo sor Juana teorizará
sobre dichos conceptos a través de acertadas alegorías con tal de elevar las reflexiones y
modo podemos ver a la América colonial como depósito externo de esa memoria europea
y que a modo de hard disk arcaico grabó y guardó en su cultura un saber ortodoxo
! 27!
(religioso y político), amenazado por los avances de la ciencia y del protestantismo.
fue clave en dicha tarea reproductiva de los modelos tradicionales del conocimiento con
tal de respaldar ese saber moral y cristiano, pero también heterodoxo y humanista. Tal
que la virtud que atesora revierte sobre la humanidad en la forma de una lección moral
sustantiva, lo que de paso encamina a este sujeto más allá de sus condiciones históricas y
que buscaba salvaguardar una balanza valórica cristiana.16 Es decir, lo que imperó pimero
los preceptos religiosos ortodoxos que se apagaban con las luces de la razón científica en
Europa. Por esto mismo comprendemos por qué la Inquisición llegó a ser una de las
ortodoxias trasplantadas severamente en América, siendo una posible amenaza para sor
Juana y sus posturas científicas. No olvidemos que una de las cosas que más se le
criticarían los tutores espirituales a la monja, antes de su silencio, fue el por qué ella no
habría escrito más sobre las sagradas escrituras en vez de literatura pagana.
pensamientos más profundos, presentando con ingenio sus preferencias y criterios. Por
eso, al leer sus poemas nos encontramos con reflexiones como la siguiente, en la que se
Sor Juana establece en sus textos ese correlato alegórico entre fe y lógica; entre
palabra y símbolo, bordeando casi siempre la reflexión moral-ética. Por eso el saber
A este corpus sincrético entre religión y ciencia hay que sumar la literatura clásica
sobre dioses y diosas que termina modelando el relato alegórico y el corpus simbólico de
! 29!
la monja.17 En este sentido coincidimos con la observación de Arenal, quien afirma:
"Como para Kircher, para sor Juana adquirir y ordernar conocimientos era sentirse más
ser humano y más cercana a lo divino. Para ella, el saber humaniza y diviniza a la vez"
("Del emblema al poema" 19). En el caso de los intelectuales hispanos como sor Juana
este sincretismo entre lo divino y lo humano opera de forma enraizante en las variedades
oficial o memoria– los relatos novohispanos del setescientos. Se trata de un tema central
conexiones, dar sentidos, leer alegorías y símbolos, y hacer conceptos del mundo. Se trata
símbolos, a medida que se nutre de las distintas culturas: la biblioteca del abuelo materno,
las lecciones de latín en la casa de los Mata, la participación en saraos en la corte de los
Jerónimo. En este sentido, ella se verá supeditada primero al manejo sabio del corpus
Podemos afirmar que su rol como mujer sabia se basó en el adoptar ese Ars et
hacia su interior. Tal como lo planteaban los herméticos, sor Juana lo que hace es
Vemos cómo sor Juana utiliza el corpus religioso (San Pablo, San Agustín)18 y
letrada una tradición que avala la educación de las mujeres. Ella responde y se refiere –
con la autoridad adquerida como mujer sabia– a los problemas metodológicos que
encaran quienes son ignorantes de los tropos literarios al momento de leer las sagradas
escrituras, en otras palabras, quienes no han realizado una transferencia sincrética del
incluye en una sola balanza los criterios retóricos cristianos y paganos reconstruyendo
Lo que sólo he deseado es estudiar para ignorar menos: que según san Agustín,
unas cosas se aprenden para hacer y otras para sólo saber: Discimus quaedam, ut
sciamus; quaedam, ut faciamus. Pues ¿en qué ha estado el delito, si aun lo que es
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
18
Un ejemplo de sincretismo del cual se beneficia la monja y que vemos expuesto en el Neptuno es cuando
sor Juana explica la correlación entre Neptuno y Harpócrates, diciendo: "Neptuno en el supuesto de
Harpócrates, dios grande del Silencio, como lo llamó San Agustín" (361).
! 31!
lícito a las mujeres que es enseñar escribiendo, no hago yo porque conozco que no
tengo caudal para ello, siguiendo el consejo de Quintiliano: Noscat quisque, et
non tantum ex aliensis praeceptis, sed ex natura sua capiat consilium? (468)
Por último, la pasión por la ordenación del saber fue otra forma de edificación del
corpus símbólico por parte de los sabios barrocos, lo que implicó un incremento del
discurso bibliográfico y del afán enciclopedista.19 La biblioteca pasó a ser una especie de
microcosmos de papel,20 una alegoría más dentro de este mundo simbólico, tal como sor
Juana proyecta en su Neptuno alegórico, que es quizás uno de sus textos más rebosados
vestigio más de la dinámica nostálgica y ambigua del sujeto barroco ante la pérdida del
A modo de recapitulación nos gustaría volver brevemente a uno de los puntos que
Merrim ha propuesto para el análisis del estudio biográfico de sor Juana. Tal como la
crítica ha indicado, al escribir [sor Juana] para la clase gobernante habría también
implicado hacer uso de su derecho como mujer de escribir en ese mundo de hombres. A
esto sumamos las ideas de Arenal quien afirma que esto le habría permitido a sor Juana
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
19!Un autor que ha desarrollado este tema en profundidad es el francés François Géal quien se refiere al
movimiento enciclopedista barroco. !
20!Término que utiliza muy acertadamente Rodríguez de la Flor, citando a Jesús Bustamante.!
21!Tal como indica Antonio Alatorre, "en el curso de la obra menciona sor Juana a más de cinco docenas de
autores, casi todos antiguos, y cita, casi siempre en latín, frases o párrafos de muchos de ellos. La
identificación de esos autores y la localización exacta de esas citas suelen ser difíciles. Alberto G. Salceda,
editor (en 1957) del cuarto tomo de las Obras completas de sor Juana, donde está el Neptuno, cumplió
bastante bien esta tarea, hasta donde le fue posible" (273).
! 32!
Capítulo VI. Sin duda la encomienda del diseño de un arco triunfal a sor Juana adquiere
escritora oficial en la colonia sólo adquiere sustento y base segura una vez que ella
más allá de la corte y del claustro se despliega en la arquitectura del monumento efímero
y luego en el texto para revelar gran parte del conocimiento sincrético del mundo
sorjuanino. Aquellos mismos muros que la separaban de la vida pública le dieron acceso,
entonces, a un valioso corpus literario-sagrado a partir del cual ella transforma su mundo
en un espacio simbólico del saber, y, en el que ella misma quedaría inscrita como símbolo
! 33!
Capítulo II
El efímero arco de sor Juana y su cristalización
cristiana, los ritos imperiales fueron motivo de importantes fiestas durante el Siglo de Oro
como propaganda política. Varios días duraban estas fiestas ya que en ellas se realizaban
medio de los cuales se abría a “la contemplación pública los aposentos del ‘sitio real’
para que el súbdito se sintiera proyectado en ese gran teatro cortesano, como parte del
cuerpo social de una monarquía [...] La Nueva España vivía pendiente de esta
triunfales, levantados para las entradas oficiales en honor de grandes personajes. Dichos
! 34!
actos conmemorativos eran financiados por la Iglesia y otras instituciones del estado, las
alegóricas. A pesar de que estos rituales variaban según el propósito político al que eran
figura homenajeada. Según George Anthony Thomas estos eventos fueron cruciales para
publicar sus obras sobre los eventos celebrados.22 Sor Juana participó en este tipo de
eventos escribiendo por encomienda una variedad de textos que cristalizaron un momento
colonia. Las instancias en las que ella participó fueron: entrada de un virrey (1680),
(1665-1674), y un triunfo militar (1691), caso del famoso epinicio de sor Juana que
escribe con motivo del triunfo de España en la Batalla de Barlovento contra las tropas
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
22!Citamos versión del texto en inglés: "During many public celebrations in the viceroyalties, occassional
genres that trace their roots to classical literature, like the triumphal arch, were a forum for aspiring astists
to showcase their talents. Compositions dedicated to peninsular authorities were often published after
theevent in conmemoratives volumes that included both laudatory verse and prose accounts of the
festivities" (38).!
23
Nos refereimos a los sonetos: 185 en honor a la muerte de Felipe IV (1665); Sonetos 190-192 en honor a
la muerte del virrey de Nueva España el Duque de Veragua (1673); Sonetos 187-189 en honor a la muerte
de la virreina de Nueva España, la marquesa de Mancera (1674).
! 35!
francesas.24
militares a ser un evento específicamente cívico, a través del cual el pueblo debía recibir
al nuevo gobernante u homenajear a alguna autoridad por otro motivo. Ejemplo de esto lo
jornadas de Felipe II (1581-1592). Según Francisco Javier Pizarro Gómez, “[l]a lectura
de las fuentes nos ha revelado una cifra total de 129 arcos triunfales en sus diferentes
modalidades constructivas y tipológicas. Sin embargo, la cifra pudiera ser más elevada,
pues con frecuencia los cronistas definen como !espectáculo! lo que en realidad
constituye un arco" (66). Entendemos entonces, por arcos triunfales los monumentos
arquitectónicos, tanto efímeros como permanentes, los que tenían como principal función
ser portadoras de contenido religioso y/o político. A modo de máquinas artísticas estos
iban decorados con pinturas y grabados que tenían como temas centrales la
parlantes en las que convergían diversas artes como la literatura, la pintura y la escultura"
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
24!El texto fue publicado junto a una descripción en prosa de otro escritor barroco de la colonia, Carlos de
Singüenza y Góngora bajo el título Trofeo de la Justicia Española. Los editores de entonces lo clasificaron
como epinicio, sin embargo, en ediciones actuales se encuentra clasificado como Silva. Véase: Thomas 44.!
! 36!
Barroca alegoría del poder
una transición ideológica e intelectual en la cual la política dejaba de ser el arte del buen
gobierno para ser razón de Estado; en otras palabras, arte del manejo de los medios que
permiten conservar el dominio ejercido sobre las gentes o "arte de conservar el Estado"
(Viroli 38).25 Estas transformaciones desembocaron en diversas reacciones, entre las que
resalta el desmantelamiento del lenguaje de las virtudes políticas, y que según Sarissa
Carneiro habrían heredado mucho de Erasmo.26 De este modo, y como respuesta a esa
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
25
Viroli analiza el lenguaje político que parte con la tradición de las virtudes políticas que perpetuaban el
derecho civil y el aristotelismo con tal de desentrañar las transiciones discursivas que definen a la política
como arte del buen gobierno.
26
En su artículo la investigadora analiza la influencia de Erasmo en la confección del argumento del
Neptuno alegórico. Según Carneiro junto a la autoridad de Séneca, Erasmo recurre a la sabiduría oculta de
los cetros jeroglíficos egipcios, y en la utilización de símbolos como la cigüeña y el hipopótamo. Aclara,
Carneiro que la cigueña era una metáfora de la piedad y el hipopótamo de la fiereza, lo que hacía del cetro
egipcio una alegoría que cifraba la clemencia venciendo los impulsos bestiales del gobernante, como la ira,
la crueldad y los deseos e venganza (76). Sor Juana sigue la misma lógica de Erasmo al proponer una clara
defensa a la paz por sobre la guerra, y en este sentido la monja reproduciría ideas erasmistas del príncipe
cristiano concebido por Erasmo en su Institutio Principis Chirstiani como un príncipe que como hace Dios,
que gana a todos para sí a través del bien. En este sentido, Carneiro afirma: "la clemencia del príncipe no
remite únicamente a la sabiduría de los egipcios y de una autoridad como Séneca, sino que adquiere un
sentido específicamente cristiano en que el favor del perdón permite la esperanza de compensar los errores
de la vida pasada, erigiéndose como virtud primordial del príncipe sabio que imita a Cristo" (80).
!
!
! 37!
buscó en alegorías de la Antigüedad llamar la atención por el lado sensorial, teatralizando
aparece así para seducir por medio de la forma, y –en el caso que nos ocupa– esto lo
Sin ahondar mucho en este tan estudiado tema, diremos que el o lo barroco se
atemporal), que se definió dentro de la historia del arte, primero, por medio de la
espacio a los juegos ópticos que retasen a la gravedad y al uso de la línea curva. Luego en
marcada por las reformas religiosas y crisis económicas, lo que se tradujo en una
la razón y la fe. En fin, una época marcada de claroscuros. La cultura barroca cobra un
valor significativo a través del espectáculo, ya que ésta opera desde lo visual,
pasó a ser entonces el lenguaje de las celebraciones novohispanas, las que reafirmaron la
! 38!
Es por es que, pensando en españoles y criollos, se implantó el modelo de fiesta
pública europea y barroca, que permitía el empleo de métodos de persuasión a lo
que aquellos estaban acostumbrados y la utilización de un lenguaje que era bien
conocido –la alegoría, el mito, la metáfora, el jeroglífico y la retórica–. (Mínguez
Cornelles 24)
su aplicación social como cultural hay que entenderlo como un medium entre los circuitos
imágenes, pasando a ser una herramienta tremendamente poderosa para permear efectos
libros de los siglos XVI y XVII, su decodificación exigió siempre una interpretación
aguda de un lector capaz de elevarlo "hasta las esferas intelectuales del concepto"
(Rodríguez de la Flor, Mundo 45). Diremos entonces, que el arte emblemático funcionó
como otro lenguaje: un lenguaje complejo y enigmático pero, sobre todo, atractivo y
deseante de sentido.
transatlántica? Sin duda, el poder unificador y simbólico del emblema fue crucial para la
habrá revisado, modificado y apropiado la Décima Musa? No por nada la monja subtitula
su arco de 1680 "simulacro político, océano de colores." Pero antes de esto hacemos un
! 39!
Actualmente contamos con interesantes teorizaciones y reflexiones sobre el
"emblema,"27 las que han despertado atención sobre la cultura emblemática en general.28
Sin embargo, como punto de partida nos remontaremos a las definiciones que hicieron los
primeros emblemistas españoles, quienes nos ofrecen mayor matiz para comprender las
reflexiones teóricas que hace sor Juana en su texto.! Sebastián de Covarrubias, por
talla, con que significamos algún concepto bélico, moral" (506). Por otro lado, Juan de
con el arte del mosaico por su estructura ensamblada: "Emblema es pintura que significa
aviso debajo de alguna o muchas figuras, y tomó el nombre de la antigua labor, que así se
decía, por ser hecha de muchas partes y encajadas, como es, con menudas piedras de
varios colores, la labor que llaman Mosaico" (F. 17 v). Por emblema entenderemos,
entonces, un género de carácter moral que contiene al menos dos elementos articulados
(texto e imagen). La estructura más clásica del emblema es el que se conoce como triplex.
Este consta de tres elementos correlacionados entre sí: una imagen; un texto breve o
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
27
Ver trabajos de: Sagrario López Poza, Estudios sobre Literatura Emblemática Española, (2000);
Fernando Rodríguez de la Flor. Mundo simbólico (2012); Frederick de Armas, Writing for the eyes in the
Spanish Golden Age (2004) y ; Nelson Bradley ,The persistence of presence (2010).; Elizabeth B. Bearden.
(2012).
28
Ver estudios de Peter M. Daily, John Maning, Elizabeth Breadsley, Mario Praz y Daniel Russell, Nelson
Bradley, entre otros. Russell, por ejemplo, estima que históricamente los emblemas fueron concebidos
como procesos al ser resultado de una red de colaboraciones entre escritor, editor y artista, fijándose en la
historia como proceso particular y característico humanista. Si tomamos como ejemplo a Alciato, éste por
ejemplo–según nos cuenta Russell– se dedicó durante 1520 a traducir epigramas griegos al latín, proceso a
partir del cual tomaron forma muchos de sus emblemas, los que más tarde fueron publicados en su libro
Emblematus Liber (1531). En este sentido, Russell acerta bastante bien ya que lo que hizo prácticamente el
italiano fue presentar algo antiguo como novedoso a través de modificaciones expuestas– no sólo en el
plano textual– sino también en el visual a través del proceso de edición involucrado, pasando a ser el arte
emblemático un proceso de renovación estética durante los Siglos de Oro.
! 40!
mote29 que encabezaría esa imagen; y otro texto de mayor extensión, a modo de epigrama
por su potencial suasorio y por la variedad de códigos sígnicos que podían interpretarse
desde distintos niveles culturales" (López Poza, "La erudicción de sor Juana" 244).
libro Emblematum liber (1510); libro que, a pesar de que su traducción llegara con retraso
del Siglo de Oro, tanto en la metrópolis como en las colonias. Estos tratados fueron la
base teórica para muchas de las construcciones alegóricas –efímeras como permanentes–
. Al analizar los libros de emblemas españoles notamos que destacan por su profundo
En esto los jesuitas ejercieron una gran influencia, en particular en el esquema retórico de
argumentación.32 Más allá de ofrecer una guía de valores al gobernante, sus tratados
emblemáticos33 exponen una reflexión en torno a la guerra y la violencia, sus causas y sus
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
29!Además, al mote o lema se denominó empresa, traducción de la palabra italiana impresa, derivada del
francés entreprise o emprise.
30!A quien sor Juana, rinde honor y cita repetidas veces en su Neptuno. Como por ejemplo cuando lo utiliza
para justificar la relación etimológica y mítica de la palabra marqués con marchio del celta "Capitán de los
caballeros"; y marchia como sinónimo de caballo (370).
31
Emblematum liber aparece en latín el año 1549 en España. Si bien es cierto de que algunos intelectuales
españoles leían entonces en latín y en italiano, sólo a partir de su circulación en español aparecen los
primeros libros de emblemática española, ejemplo de esto son: Empresas morales (Praga, 1581) de Juan de
Borja; Emblemas morales (Segovia, 1591) de Juan de Horozco y Covarrubias; Empresas morales (Madrid,
1610) de Sebastán de Covarrubias; y Empresas espirituales y morales (Baeza, 1613) de Juan Francisco de
Villava.
32
Ver Antonio Bernat Vistarini y John T. Cull. 12-3.
33 Un ejemplo de esto son las Empresas Sacras de Núñez de Cepeda (1680).!
! 41!
lamentables consecuencias presentando problemáticas de una España que desde la muerte
los siglos XVI-XVII en Europa.34 Por otro lado, el destacar la función apelativa (la
ya que este género propone una forma de analizar el mundo a través de una unidad
sintagmática doble: texto (el alma, lo inteligible) y el grabado o pintura (el cuerpo, lo
sensorial). Un efecto similar tendría en cuanto a lo estético; tal como indica de la Flor, los
por entonces se pretende dar a una realidad que enlaza Cultura, Naturaleza y
Sobrenatural" (Mundo 103). Esa visión ornamentada del mundo irrumpió dando una
simbólico.
jesuita que adquiere un rol central durante los tiempos de la Contra Reforma. Los
moral. Muy famosa es una centuria35 de Sebastián de Covarrubias en la que, con tono
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
34!El trayecto evolutivo de la literatura emblemática lo encontramos entre los reinados de Felipe II y Felipe
IV. !
35 Ver Anexo, Imagen 3. En la imagen de la centuria se muestra a dos caballeros o militares celebrando las
ganancias de la guerra. Sostienen entre ambos un objeto, suponemos de oro, que es lo que valóricamente
! 42!
Después que se dexaron las puñadas,
Y se armaron los hombres con el hierro,
Los de lanzas forjando, y los de espadas
Con que cometen uno y otro yerro:
Lloramos las edades ya pasadas,
Yo me puedo engañar, no sé si yerro;
Pero de veras me lamento y lloro,
Que los hierros se doran hoy con oro. (Emblema 62, 262. Énfasis mío)
partir de entonces comienzan a tomar cada vez más fuerza temáticas relacionadas a la
en ambos lados del Atlántico–. Es sólo a partir de entonces que las imágenes
emblemáticas parecen adquirir una función más política, tapizando las ciudades con
mensajes morales.
se venían construyendo desde siglo y medio antes del arco de sor Juana fuera construido.
Las celebraciones más pomposas que se llevaron a cabo en Nueva España sin duda
fueron las entradas de virreyes, para las cuales se requirió siempre el levantamiento de
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
simbolizaría la avaricia y las ansias de poder con el que se llevan a cabo las guerras en tiempos de Reforma
y Contrareforma. En este sentido el poema del emblema no sólo explica los valores rechazados de la
imagen sino que también responde a esa imagen a través del sentido nostálgico. Cabría entonces
preguntarse haciendo el mismo ejercicio interpretativo, qué aspectos nostálgicos encontraríamos en los
lienzos y emblemas del Neptuno alegórico de sor Juana, qué elementos ella rescataría de otros tiempos, tal
vez la imagen misma de Isis puede ser analizada como elemento nostálgico en la obra de la monja, por lo
que sería necesario quizás ahondar aún más en la abundancia de citas con que ella maquina el discurso.
Aspectos retóricos que abordaremos en el capítulo final de esta Tesis.!
! 43!
España. Según Sagrario López Poza, el primer arco del que se tiene conocimiento es el de
muchos más. En todos ellos ya se habían utilizado figuras de la mitología tal –como lo
[Para] la entrada del marqués de Villena (1640) se tomó a Mercurio como motivo
iconográfico para mostrar que el virrey traía a Nueva España prosperidad y paz.
El rey Felipe IV, con atributos de Apolo, le entregaba el caduceo, y Venus, con
sus palomas, auguraba la concordia y la paz. Al virrey Conde de Baños (1660) se
le identificó con Júpiter. El marqués de Manzera (1664) fue equiparado con
Eneas, y al virrey duque de Veragua (1673) se asimiló con Perseo, rey de la
Argólida, fundador de Micenas. El arco dedicado a este virrey, igual que el que
realizaría Sor Juana, explicaba el programa en ocho pinturas y seis emblemas.
(López Poza 248)
llegada tenían que seguir un ritual político que comprendía la entrega simbólica de las
portentosa entrada del virrey a caballo en la ciudad de Tlaxcala, precedido por nobles
criollos y nobles indígenas, hasta llegar al final de la calle Real donde se había elevado un
arco efímero dedicado al virrey. Mientras el virrey pasaba con su consorte por el arco se
le declamaba una loa explicativa de las alegorías y pinturas que decoraban el monumento.
La entrada oficial del virrey se llevaba a cabo en la Ciudad de México, donde se le daba
una bienvenida como si se tratase del rey. La ceremonia de entrega de llaves se realizaba
en la plaza de Santo Domingo y una vez finalizado este acto, la comitiva se dirigiría a la
Catedral Metropolitana para entonar un Te Deum. En el caso que a nosotros nos importa,
ahí es donde el Marqués de la Laguna y su comitiva verían el arco diseñado por sor
Juana, ante el cual el cortejo se detendría a escuchar la explicación del arco en verso. Una
vez dentro de la catedral, "el virrey juraría ante el arzobispo y el cabildo catedralicio
! 44!
defender la fe católica y a su Iglesia" (López Poza 249). A través de estos actos
colonia para con la corona española, pero además se pactaba una fidelidad entre la
España.
tapizados con atractivos emblemas. El arco que se erigió en la Plaza de Santo Domingo
encomendado a sor Juana por el Cabildo catedralicio, más precisamente por su amigo el
exvirrey obispo, Fray Payo Enríquez de Rivera. Como resultado de esta invitación a la
monja tuvo lugar la edificación arquitectónica del Neptuno alegórico y además la entrega
pagado a la monja, por lo que podemos inferir que ya a esas alturas era considerada como
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
36 La virreina poseía un título nobiliario, era!princesa de la casa de Mantua y undécima condesa de
Paredes. Ver articulo de Antonio Rubial García "Las virreinas novohispanas presencias y ausencias." Esto
significa que la virreina poseía un estatus de nobleza por linaje propio y no por ser relativa a familia de
virreyes.!
37!Teatro de virtudes políticas que constituyen a un príncipe (1680).!
!
38 Ver Anexo, Imagen 2.!
! 45!
una escritora profesional, así lo indica Arenal en su Introducción a la edición crítica del
Neptuno:"se le pagan 200 pesos, más de lo que se le había ofrecido en primera instancia,
más la explicación de los jeroglíficos de las basas y los intercolumnios; y por último, un
poema en silva titulado "Explicación del Arco," pensado para ser recitado en el momento
en que el virrey y su consorte pasaran por esa bóveda de imágenes pintadas sobre fingido
de los arcos efímeros construidos tanto en España como en la colonia, eran de una
bóveda, es decir, de una entrada. En su "Razón de la fábrica" sor Juana explica a modo de
écfrasis39 las dimensiones del arco40, el que constaba de treinta varas de altitud (25 metros
además contendría tres cuerpos, cada uno de distinto estilo arquitectónico: corintio,
dórico y compósito. En cuanto a las decoraciones del arco este incluyó en su cornisa seis
esculturas y el escudo de armas del marqués. Estas "seis figuras brutescas" (373), como
las llama sor Juana, sostenían un tarjón en que se hallaba la extensa dedicatoria al virrey.
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
39
Entendemos por écfrasis al!recurso retórico implica en su acepción la descripción de una obra de arte
desde la imaginación o la mirada de un sujeto observador. Tema que abordaremos en profundidad en el
capítulo final de este trabajo.!
40!Ver anexo, Imagen 1.!
! 46!
El cuerpo del arco fue tapizado con ocho lienzos41 que representaban cada uno una escena
pintada al óleo sobre las hazañas del dios Neptuno. Por último, su primer nivel o base de
dos intercolumnios y cuatro basas fue decorado con seis jeroglíficos, dos de ellos
dedicados a la marquesa. Si bien, no contamos con ningún dato sobre los pintores que
llevaron a cabo el trabajo de decoración al óleo del arco, podemos aún así imaginar el
estilo barroco que tendría como estampa de la época en que fue construido, tal como
Es de anotar que las jugosas descripciones de Sor Juana al calificar este arte
efímero. Incluso en el título del impreso que explicaba el arco: "Océano de
colores", es muy expresivo de los derroteros por los que caminaban las artes
plásticas del momento. No olvidemos que por estas fechas (1680-1685), se
iniciaba la plenitud de la pintura barroca mexicana con Juan Correa y Cristóbal
Villalpando. (267)
!
Los materiales con los que regularmente se fabricaban los arcos era madera y tela,
disfrazados de materiales permanentes (mármol, bronce), por la pintura que los cubría. La
sumaba el uso de estaño o cera para aspectos decorativos como esculturas o relieves. El
arco de sor Juana estaba hecho de madera, trapo y yeso (Paz 212). Con un espíritu
barroco sor Juana diseña el aparato artístico con el fin de que aparentase materiales
perpetuos, con tal de recibir elogios de los relatores y cronistas encargados de describir
los arcos:
El primer fue cuerpo de obra corintia, fundamentada sobre diez pedestales, que se
manifestaban por sus resaltos con sus intercolumnios; las columnas fingían ser de
finísmo jaspe, y el zoclo, corona, cornisa y collarín, de bronce, con seis tarjas de
lo mismo; sobre que se asentaban seis columnas de fingido jaspe, revestidas en el
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
41
Para detalles de la distribución de los lienzos, ver imagen 1, anexa. Modelo del arco sorjuanino, de
Georgina Sabat de Rivers.!!
! 47!
tercio de máscaras de bronce, con un plinto, basa y capitel; el arquitrable, triglifos
y collarín de lo mismo; friso y dentellones de jaspe; cornisa, paflón y volada de
bronce. (373)
apariencia: "los colores dorados y bronce de algunos detalles decorativos de los arcos
narrador barroco, el color era otra imagen digna de registrar en la memoria, por lo que el
uso cromático alcanzado en las artes efímeras e instalados a los ojos del público constaba
Sor Juana presenta en los lienzos coloridos del arco las empresas y virtudes del
dios Neptuno, imágenes que e inscripciones que–según ella– se llevaron "la atención de
los entendidos" (374). A modo de síntesis, la fábula comienza con la llegada de Neptuno
saladas iras del mar" (377), y amenazada a perderse por la inundación, como mostraba el
segundo lienzo. Una vez fijada, la "isla […] apareció al mundo": "pues el temor de éste
! 48!
[el mar] estorbaba su descubrimiento" (lienzo tercero). Luego, en el lienzo cuarto se
por Aquiles. Acto seguido, se muestra en el quinto lienzo a Neptuno como "tutelar numen
de las ciencias" (382), quien recibe a los doctos centauros y coloca entre los astros al
delfín (ministro), por sus insustituibles servicios (sexto lienzo). Una vez establecida la
ingenios donde Neptuno es vencido por Minerva, que no es otra que su sabiduría. Así
Como decíamos, en la escritura para el arco, sor Juana usa una variedad retórica
con el fin de crear alianzas simbólicas entre los circuitos de poder virreinal y la
comunidad letrada a la que ella ya pertenece. Vemos además cómo el ejercicio ecfrástico
está cargado de un sentido ideológico moral desde el cual ella interpreta el mundo. De
este modo, y tomando como referencia el análisis de Julie Brokser sobre los mensajes de
los lienzos del arco sorjuanino, diremos que en el argumento del Neptuno se presentan
dos tipos de mensajes políticos, por un lado tenemos un mensaje de carácter funcional
"oportuna intervención" (378), con tal de remediar los problemas de desagüe debido a las
incompleto de la misma Catedral en cuya puerta occidental se instalaría el arco. Por otro
lado, el texto presenta un mensaje de carácter ético a través del cual sor Juana recomienda
En sus mensajes políticos funcionales, sor Juana incluye lo que en su opinión ella
! 49!
desearía que el virrey hiciera respecto a los problemas de la ciudad los cuales se
presentan con énfasis en las pinturas 2, 3, y 8. Revisemos brevemente las pinturas que
describe sor Juana y las peticiones que ella expone en cada una.
Mito: Sor Juana tomando el mito como referencia le pide al virrey una solución al problema de
las inundaciones de ciudad de México por estar asentada en una cuenca cerrada de cinco lagos.
Además, le pide la creación de un sistema de drenaje: “un río por donde fluya una laguna, en su
tan necesario como ingenioso desagüe” (378).
Mito: Esta pintura describe la mítica isla de Delos, que fue la cuna de la diosa Diana y de su
hermano gemelo Apolo, isla que fue restaurada por Neptuno. Sor Juana representa a Diana como
la plata y a Apolo como el oro, simbolizando ambos la riqueza de la tierra mexicana que alguna
vez adoró a los astros, siendo la plata la Luna y el Sol el oro: "Ofrece “Diana en plata y Febo en
oro (....) Y así, parece que se apareció el mundo a merced de Neptuno; pues éste dio paso a sus
ondas para poder gozar sus inmensas riquezas, y para que en sus minerales se probase ser patria
del Sol y la Luna" (380). Diana, tal como lo indica Arenal en su introducción, representa a la
razón, y añadimos a este análisis que el oro de Febo simbolizaría entonces la valentía y fuerza con
que Neptuno finalizaría los trabajos de la ciudad.
Además, en este lienzo sor Juana pide al virrey no sólo fijar en lo físico a la Ciudad de México,
sino también en cuanto a seguridad y estabilidad política y social, expresando explícitamente la
necesidad de una razón de estado.42 Lo que queda plasmado en una décima que termina con esta
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
42!Según Maurizio Viroli la idea de "razón de Estado" fue posible gracias a discursos políticos elaborados
en la segunda mitad del siglo XIII y que lograron su momento de gloria durante el humanismo cívico del
seiscientos. Según Viroli, la diferenciación entre Estado de alguien y la república era uno de los elementos
esenciales del lenguaje político renacentista, ya que las rivalidades entre estos terminaron dando a luz a la
razón de Estado. Por ello cuando nos referimos a "política" es el arte de gobernar una república de acuerdo
a los principios de justicia y de razón, y la razón de Estado es la ciencia que permite conocer los medios
para conservar y engrandecer el Estado. Siendo por tanto el objeto de la política la república, mientras el
objetivo de la razón de Estado, el Estado. Este periodo de rivalidad desembocó en una revolución política
en la cual se pretendían establecer en Europa dos formas de organización de la vida pública. Una que
justificaba las ideas y la otra por los medios, revolución que se vio acentuada por la crisis ideológica-
! 50!
exclamación:
Pintura 8: La Catedral con las torres sin terminar, está pintada con la imagen de fondo de la
ciudad de Troya. Neptuno, con instrumentos de ingeniería, y Apolo, con su lira, terminan la
contrucción de la ciudad romana.
Mito: Sor Juana le pide al virrey que termine la Catedral así como Neptuno y Apolo terminaron
la construcción de la ciudad de Troya, lo que la monja explica en una octava que empieza así:
El mito juega un rol primordial en las pinturas que sor Juana pensó para los
pilares del arco, ya que le ayuda a la escritora a justificar los argumentos morales con los
atención en el caso del octavo lienzo el modo en que sor Juana conecta en el mote como
en el mito la labor de reconstrucción de la ciudad con una visión activa sobre el ejercicio
construcción de la catedral, toma como ejemplo la épica de Virgilio quien habría descrito
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
religiosa iniciada con los movimientos luteranos y protestantes, seguidos por la Contrareforma. Ver Viroli
35-44.!
! 51!
acompañado de la siguiente octava:
El resto de las cuatro pinturas que se encuentran en las esquinas de cada basa del
arco expresan consideraciones ético-morales. Cada uno de los motes indicará una fábula
sobre una virtud que el gobernante debe ejercer. A través de la alegoría y del mito, sor
Juana pudo construir la imagen de un "príncipe ideal" haciendo del mito renovado un
epítome de la tradición clásica y la filosofía antigua. Así, sor Juana propone distintos
Consejo y valores: Evadir el orgullo y mostrarse Mote: Sat est videat ut provideat.
amable hasta con el posible enemigo.
Consejo y valor: Ser sabio, compasivo y virtuoso. Mote: Addit sapientia vires.
Explicación del mito: Se presenta a Neptuno como "tutelar numen de las ciencias" (382) dando la
bienvenida a los centauros a quienes sor Juana describe como conquistadores de la razón. Los
centauros, explorando más allá de los pilares, demuestran a Hércules que éste estaba equivocado.
En este sentido los centauros pasarían a representar la sabiduría de los conquistadores españoles
que se aventuraron a nuevas tierras!y que ahora viven en México. Sor Juana al mostrar a Neptuno
! 52!
compasivo y entregando asilo a los centauros, aconseja al virrey mostrarse igualmente compasivo
con los criollos.
territorios. Las islas griegas serían la referencia simbólica para las chinampas aztecas de
"¿qué más manifestum, et apparens, que la que tantos siglos se ocultó, como en el mar,
pues el temor de éste estorbaba su descubrimiento?" (380). Así se dirige sor Juana a él en
Pintura 6: La pintura muestra a un delfin, quien persuade a Anfititre a casarse con Neptuno.
Explicación del mito: El delfín es descrito como poseedor de especial elocuencia, como un
oratore. Dice sor Juana en la prosa explicativa: “Representaba todo este hermoso aparato, la
liberalidad y cordura tan notoria en Su Excelencia, de cuya noticia está tan lleno todo el
Orbe; y las felicidades que este reino se promete en su tranquilísimo gobierno” (388).
!
Vemos en la sexta pintura cómo sor Juana propone una unificación, de los
poderes de los sujetos sociales, 43los que –dentro de una lógica imperialista de la que ellos
mismos forman parte– autorregularían ese orden jerárquico, la balanza del poder,
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
43!Ver Anexo, Imagen 7. La imagen corresponde a un mosaico griego en el que se presenta a Neptuno en
su carro tirado de dos caballos marinos y que, como hemos analizado en el lienzo anterior, guardan relación
con el símbolo de los sabios centauros. Además vemos la figura del delfin debajo de Neptuno, en la esquina
derecha del mosaico, el delfin acompaña a Neptuno, nadando a su lado, tal como sor Juana propone en los
lienzos una cooperación y unión de poderes entre los sabios criollos y el virrey para lograr un "gobierno
ideal". !
! 53!
entendido como una relación dialéctica entre las partes y roles dentro de la sociedad.
Ideas neotomistas que sor Juana incluye en el argumento. Es decir, al tener el príncipe al
delfín (sabio - criollo) como ministro, significaría que él mismo representa la inteligencia
como virtud, lo que se traduce en periodo de paz para el pueblo. En ese sentido,
entendemos que sor Juana usa el arte retórico con tal de persuadir al virrey en la
entonces tendría como propósito la educación moral del gobernante desde una
(criolla). Recordemos que a pesar de que dichos arcos representaban el poder soberano
virrey), ocho oidores, cuatro alcaldes del crimen, dos fiscales (criminal y civil), un
alguacil mayor y otros funcionarios menores. En este sentido el virrey debía establecer
buenas relaciones con los miembros que conformaban dicha Audiencia antes de
establecer su plan político. A su vez la Real Audiencia podía reunirse sin la presencia del
virrey, por lo que sus miembros disfrutaban de cierta independencia, aunque sólo en
cuanro a temas jurídicos. Sin embargo, en el ámbito político, el virrey tenía absoluto
poder.
Estas ideas políticas se sintetizan en la pintura del primer lienzo, donde sor Juana
presenta a Neptuno junto a su esposa Anfitrite, diosa de los monstruos marinos, quienes
! 54!
representan respectivamente a los virreyes de la Laguna. Haciendo énfasis en el símbolo
del tridente, sor Juana lo titula con el mote "Munere triplex" (triple en su oficio), y agrega
un soneto explicativo en el cual establece las correspondencias analógicas entre las tres
tridente y los tres poderes del virrey: civil, judicial y militar, simbolizados en el bastón:
Al hacer énfasis en el símbolo del Munere triplex, sor Juana advierte al virrey la
urgencia de establecer con prudencia y sabiduría el equilibrio de poder entre las tres
facultades, con tal de establecer un buen gobierno. De este modo, la monja aconseja
clemencia (simbolizada por "lo dulce") en cuanto a los eventos de orden civil; defensa
cuanto a la acción militar. Acciones que deben ser reguladas con sabiduría, ya que para
sor Juana se pueden perdonar muchas faltas a un gobernante pero "sólo no se puede suplir
que no sea sabio; porque la sabiduría, y no el oro, es quien corona los príncipes" (367).44
Es aquí donde los arcos triunfales jugaron un rol significativo como canalizadores de
mensajes para la configuración de los intereses entre los circuitos de poder de la colonia –
concentrado en los cabildos catedralicios– y los intereses personales y políticos del nuevo
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
44 Reflexión que ya otros famosos emblemistas españoles habrían hecho durante el reinado de Felipe III
proyectando la idea de un príncipe cristiano. Tal como Antonio Bernat Vistarini y John T. Cull explican en
su estudio sobre los emblemistas jesuitas, Andrés Mendo anunciaba por ejemplo: "Válgase [el gobernante]
de letras y de armas, que conservan unas lo que ganan otras" (21).Ver "Guerra y Paz en "La emblemática
de los jesuitas", páginas 12-13. !
! 55!
gobernante, circuitos que no siempre pudieron ser consolidados en los terrenos
En este sentido, mensajes como el del lienzo sexto y el primer lienzo del arco
tenían como propósito no sólo presentar atractivas imágenes al virrey y su consorte, sino
Dice sor Juana: "De donde se colige que Minerva, en este sentido, no es distinta de Neptuno,
sino su propia sabiduría" (391).
y acciones que refieran al autodominio racional, los que se ven puestos a prueba en el
capítulo siguiente.
! 56!
El emblema como huella mitohistórica
como una vasta alegoría que debe ser comprendida en otro plano: el plano simbólico, y
carácter público y popular– era dirigido en primer orden y según los intereses de la
comunidad letrada y los círculos de poder. Tal como indica Pascual Buxó, no parecería
didáctico-dialéctico, ya que presupone una conversión tanto del escritor como del lector,
siguiente pregunta, ¿qué quería enseñar sor Juana?, ¿qué deseaba que fuese revisado y
recordado por medio de los alegóricos lienzos? Al legitimar el poder por medio de la
fábula sor Juana aprovecha para exigir ciertos planes de acción al virrey presentando
ideologías y visiones del poder desde una posición que– aunque ambigüa y compleja– es
como indica Kathryn M. Mayers al analizar la retórica criolla no podemos reducirla a las
a modo de ventana al contexto histórico. Por ejemplo, sabemos que sor Juana forma parte
! 57!
de una elite criolla y que pertenece a la Iglesia Católica, no obstante, también sabemos
que por el hecho de ser mujer sufrió las restricciones de su época; así como sabemos que
interpretación que implica nos vemos enfrentados a un sujeto escritural con motivaciones
no siempre explícitas. Por eso cuando leemos a sor Juana nos encontramos con una
negociación con el orden imperial, por lo que el mundo simbólico expresado por medio
de ese arte ecfrástico será por momentos escurridizo y ambigüo; ya que a pesar de que
estos discursos pretendían construir una imagen cohesiva entre el poder imperial y la
ortodoxia religiosa, se filtró de modo inevitable lo que Mabel Moraña denomina como la
Podemos concluir en que durante este periodo de producción ecfrástica, sor Juana
fue cómplice de esa tremenda paradoja barroca, diseñando con maestría esos engaños y
desengaños coloridos del arco. Tanto los mensajes políticos de la fábula como sus
Como vimos para la descripción de cada uno de los lienzos, al hacer uso del
discurso emblemático sor Juana sería motivada por un "ethos barroco"45 a partir del cual
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
45!Concepto propuesto por Bolívar Echeverría en su libro. La modernidad de lo barroco (1998), para
explicar"la construcción histórica de Latinoamérica", siendo el ethos barroco un fenómeno que "se hace
evidente en aquellos momentos en los que se aceptaría más contradicción" (231).
! 58!
ella busca revertir esa realidad injusta y jerárquica que le tocó vivir; proceso que según
Walter Benjamin se debe a esa "constante tensión entre el curso homogéneo de la historia
sentido, sor Juana se apropia de una retórica no sólo para entregar su visión del buen
gobierno sino, también para exhibir el rol que a ella le toca jugar dentro de esa estructura
jerárquica del poder. Creemos que la monja se presenta al virrey por medio de la figura
del delfín como esa sabia consejera y poeta que el virrey debe amparar durante su
La Laguna los mecenas más relevantes para la monja. Es más, ¿que sabríamos hoy de sor
los primeros volúmenes? Durante los ocho años de gobierno de Tomás de la Cerda y
María Luisa (Lisi de sus poemas) sor Juana desarrolla la más relevante producción
literaria y filosófica. Contando con la amistad de esta poderosa pareja, Juana Ramírez de
obstaculizado sus metas profesionales. Tal como lo indica Dorothy Schons, bajo este
this was the begining of a brilliant and happy period of the gifted nun. Her new
patrons encouraged her in her literary ambitions. It was for them that she wrote
some of her best works during their residence in New Spain, sor Juana devoted
mote time than the church approved of the wordldly things. The viceroy and his
wife were frecuent visitors at the convent. The nun became very popular in court
cicles, and was the object of many attentions (...) she was in contant contact with
the world. (46) !
!
!
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
46!En sus propias palabras: "a revolutionary chance in the fight for the oppressed past. [The historical
subject] takes cognizance of it in order to blast the specific era out of the homogeneous course of history –
blasting a specific life out of the era or a specific work out of the lifework" (263). !
! 59!
De este modo creemos que el Neptuno alegórico debe ser analizado como umbral,
que le permite por un lado conquistar los espacios públicos más allá del claustro y por
otro lado, un periodo de producción estratégico que nos ayuda a comprender temas
un muy eleborado discurso y opinión propia sobre la soberanía del intelecto, temas que
presenta como primer intento de abordaje metodológico en la escritura del arco y que
podemos ver madurados en obras posteriores. Por último, en el Neptuno alegórico, sor
Juana no sólo cristaliza un momento histórico sino también el texto fijaría las primeras
apropiaciones poéticas, los que quizás otorgan una mejor metodología para comprender
sus selecciones, gustos, y búsqueda de una voz propia como escritora, temas que
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
47
Me refiero a los aspectos alegóricos, emblemáticos, mitológicos y retóricos de su obra y que aplica de
forma brillante y original en obras posteriores como el Primero Sueño. Sin embargo aquí podemos ver el
vestigio de un primer discurso en el que desplegó una erudicción asombrosa y nos permite acceder a su
biblioteca, es decir a al cosmos sorjuanino.
! 60!
Capítulo III
capítulos anteriores pero que queremos profundizar en este ensayo de tesis, y es que en el
texto sorjuanino no encontramos la imagen de los emblemas que sor Juana diseñó; ya que
este sentido, el trabajo de ensamblaje de los componentes (texto e imagen) de los lienzos
y figuras jeroglíficas del arco exige un desafío mayor para sus lectores, ya que al no
constar con un soporte visual impreso, debemos imaginar lo que a su vez la misma sor
Juana imaginó y describió –como sabemos– sin ninguna oportunidad de ver el arco, ya
Además, teniendo en cuenta que el interés por lo visual era un tema ya recurrente
en sor Juana,48 creemos necesario insertar esta motivación en un contexto mucho más
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
48 !Nos referimos esencialmente a sus ovillejos que aparecen en Inundación castálida junto con la
publicación del Neptuno alegórico en 1689. También ver los sonetos amorosos dedicados a las virreinas y a
sus mecenas, y el Soneto CXLV, a su retrato. Para los estudios de écfrasis en la obra de sor Juana,
recomendamos el estudio de Frederick Luciani, Literary Self-fashioning in Sor Juana Inés de la Cruz
(2010);.en él el autor analiza el “perspectivismo" en los ovillejos. Ver también los ensayos de Georgina
! 61!
amplio relativo a los debates encabezados por varios artistas renacentistas y barrocos. Por
ejemplo, uno de los primeros historiadores del arte, Giorgio Vasari en su libro Le vite de'
ecfrástico elevó las artes plásticas a artes liberales, homologándolas a la poesía. Con ello
los artistas pudieron gozar de un mejor status social y reconocimiento dentro de los
Iconología (1593), siendo sus ideas constantemente replicadas por escritores como
Cervantes, Lope de Vega, entre otros.49 Otro ejemplo es el famoso texto Diálogos de
pintura (1633) de Vicente Carducho, quien postulaba que desde la circulación de las
Soledades de Luis de Góngora no había habido tanta "semejanza y unión"50 entre pintura
y poesía y, más aún, afirmaba el pintor que estas debían imitarse la una a la otra, razón
por la que concede en su libro uno de los lugares más elevados a Luis de Góngora, ya que
"en cuyas obras está admirada la mayor ciencia, porque en su Polifemo y Soledades
parece que vence lo que pinta, y que no es posible ejecutar otro pincel lo que dibuja su
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Sabat de Rivers sobre los retratos de sor Juana (1982, 1984, 1986). Y los estudios de Emelie L. Bergmann
sobre écfrasis de sor Juana desde una problemática feminista y centrado en el análisis del Primero Sueño
"Optics and Vocabularies of the Visual in Luis de Góngora and Sor Juana Inés de la Cruz" en Writing for
the Eyes in the Spanish Golden Age. págs.151-65.
49!Para estudios de écfrasis en la literatura del Siglo de Oro, ver: Writing for the Eyes in the Spanish
Golden Age. Frederick de Armas (ed.). 2010. En particular recomendamos el ensayo de la Introducción
escrito por de Armas: "The Pinter and the Writer Are One and the Same" (Mis)placing the Muse: Ekphrasis
in Cervantes´La Galatea. 7-23.
50!Referencia parafraseada a Carducho extraída del ensayo de José Pascual Buxó: "Sor Juana y Góngora:
teoría y práctica de la imitación poética". En: Sor Juana Inés de la Cruz: El sentido y la letra, 2010. p. 156!
! 62!
No es coincidencia entonces, que sor Juana mencionara en su Neptuno alegórico
ideas similares a las de Vasari51 o a las de Carducho como cuando nos dice que hablará
con lenguaje alegorizante ya que "porque en las sombras de lo fingido campean más luces
de lo verdadero (...) o ya porque sea decoro copiar del reflejo, como en un cristal, las
perfecciones que son inaccesibles en el original" (358). Lo que aprovecha de hacer sor
Juana es, precisamente, teorizar sobre dichos puentes entre literatura y pintura.52 A partir
de este ánimo ella afirma que el uso de emblemas y alegorías había sido usado por parte
de los antiguos con el fin no sólo de "atraer a los hombres al culto divino con más
agradables atractivos, sino también por reverencia a las deidades, por no vulgarizar sus
Sobre este carácter didáctico del lenguaje alegorizante, recordemos las reflexiones
de José Antonio Maravall, quien enfatiza en su análisis de la cultura del Barroco que la
pintura logra posicionarse como modelo de representación visual entre el resto de las
artes, afirmando este autor que en una sociedad en la cual la clase dominante tiene la
entonces "confiere un lugar preeminente, por la eficacia con que se piensa que mueve los
por parte de escritores y emblemistas por lograr concebir una imagen a través de la
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
51!A su vez, y tal como explica Liana de Girolami Cheney, Vasari buscó en Aristóteles los fundamentos de
sus teorizaciones. Recordemos que en Poética, el filósofo explica que el arte de la imitación (mimesis) se
basa en una cualidad innata del ser humano así como el niño aprende por medio de la imitación. Vasari
sigue con estas ideas y conceptualiza la creatividad artística entendida en dos esferas: una divina y otra
humana. En la esfera divina el artista sería como el hijo de Dios que lo imita a través del arte. La segunda
esfera corresponde a la evolución del arte entendida como una progresión de la vida humana misma. Ver
Giorgio Vasari´s Prefaces Art & Theory.
52!Ideas y teorizaciones que ya habían sido popularizadas tanto por Cervantes como por Calderón de la
Barca y Lope de Vega quienes intentaron elevar las artes plásticas insertando sus técnicas de percepción
ecfrástica en la escritura, posicionando así a la pintura como un arte más allá de lo funcional. !
! 63!
palabra. En otras palabras, lo pictórico se situaba como “objeto de observación para
esas dimensiones didácticas y creativas del discurso pictórico, las que le permitieron
establecer conexiones entre tradición literaria y arte, y con ello poder transmitir cierta
novohispana.
Por otro lado y tal como dice John Maning, durante el Barroco "[t]he past was
drawn into the present" (14), y en ese proceso de traspaso visual la representación del
mito grecolatino así como los enigmáticos jeroglíficos pasan a ser el telón de fondo que
otorga valor moral a la creación literaria. Esto se debe a la creencia neoplatónica de que
el retrato pictórico tenía el poder de representar lo que los ojos no podían ver de modo
bondades del alma. Por ello, es que para los escritores como sor Juana como Góngora o
virtud o un bien en sí misma. Como vemos tales postulados fueron popularizados muy
acorde a los argumentos religiosos del Concilio de Trento que respondiendo a la crítica
la Iglesia, agentes censuradores de todo lo que pudiera ser transgresor (herejía), lo que sin
duda afectó la forma en la cual los artistas ejercían su libertad creadora. Creemos por
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
53!Citamos la idea completa del original: "In addition, the theological response to Protestants attitudes
toward church decoration is evident in the treatises´attention to the devotional uses of images. Carducho
cites an episode from the Life of Teresa of Ávila to argue that the sensory inmediacy of a polychrome
sculpture of the cruxifiction was effective in causing spiritual transformation in way that a cruder painting
or printed image could not have been (1979, 368)" (Ctdo. en Bergmann, 152).!
! 64!
estas mismas circunstancias es que los escritores buscaron justificar y legitimar sus obras
por medio de los puentes que se establecieron entre literatura y otras artes liberales. A
barrocos recrear a partir de obras ya aceptadas o reconocidas por los censores como parte
de la tradición. Dichos puentes entre artes fueron más bien un modo de sobrevivencia del
Neptuno, por ejemplo, vemos cómo sor Juana logra –a pesar de las prohibiciones de su
instaurar sólo por medio de la escritura. El perspectivismo visual y el simbolismo que sor
Juana explora en esta obra derivan del modo ecfrástico, lo que le permite –además del
mero ejercicio panegérico, bajo el cual habían sido comúnmente ideados los programas
encomendados a más de un autor, por ejemplo, el argumento y diseño del aparato efímero
corte. La poesía para ser recitada en el momento del evento y servía para esclarecer los
"levantaban fiel acta de lo presenciado en la fiesta, pero sin entender del todo, en
caso del Neptuno no contamos con ninguna relación oficial sobre el encuentro del virrey
! 65!
con el arco triunfal y su entrada a la Catedral. Sin embargo, tenemos la suerte de que la
misma autora fuera la encargada de escribir el poema ekfrástico en silva “Explicación del
fábula,” por lo que ambos conforman de modo coherente un solo programa iconográfico
previo a la construcción del arco. En este sentido, los textos por encomienda no solo
sirvieron para transmitir un mensaje oficial, sino también fueron transmisores de los
deseos de una comunidad letrada, debatida entre la tradición (visión metropolitana) y los
respecta al caso de sor Juana. El Neptuno alegórico, entonces, es más que una relación y
también es más que un "libreto, guión o plan para un arco triunfal" (Arenal,
retórico, quizás uno de los más relevantes en agudeza conceptista barroca. Tal como
indica Alatorre llama la atención que a pesar del acortado tiempo que tuvo para preparar
el texto, sor Juana "acomodó [con cuidado] los detalles todos de la pieza" (270).
Tal como W. J. T. Mitchell (2005) explica, la relación entre imagen y texto que
audiencia a la que va dirigido el texto. En el caso de sor Juana, ella se dirige al virrey y
europea y conocedores del arte simbólico y alegórico. De este modo, y tal como Buxó
explica, el Neptuno contiene una de las reflexiones más lúcidas sobre los arcos
triunfales como dispositivos claves para el ejercicio del poder imperial debido a "su
! 66!
mensajes políticos y éticos que sor Juana incluye en algunos de los lienzos del arco y
ékfrasis puede ser utilizada por tres razones: i. por su asociación retórica con el ethos en
estructura narrativa y iii. por su capacidad para crear una profunda base de tensión
ideológica, en una cultura binaria. Pero quizás lo más relevante sea que:
creación pictórica, ya que sor Juana pinta con palabras los lienzos del arco, ejercicio que
evidencia más aún en el poema final en lira de la "Explicación del arco." El poema
consta de 257 versos en los que sintetiza las ideas más relevantes del argumento en
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
54!La definición de écfrasis bajo la cual guiaremos este análisis es el propuesto por Frederick de Armas
(2010). Su definición ubica el concepto desde la antigüedad clásica “as the description in words of a work
of art goes back to Hellenistic times and can be found in Philostratus’s Eikones. Before that, the term was
applied to any lengthy description that stopped the flow of a narrative” ("(Mis)placing the Muse” 26).
! 67!
prosa, éste se divide en ocho partes, cada una correspondiente a la descripción de cada
uno de los lienzos del arco. Vemos cómo con tono ecfrástico sor Juana apela
El poema finaliza con una invitación al virrey a pasar por la bóveda del arco:
"Entrad, Señor, si el que tan grande ha hecho/ tantos años la sabia arquitectura, /es capaz
cabe duda de que este texto habría sido concebido para ser recitado en el momento de la
inauguración del arco triunfal, y que notamos por su especificación espacial (casi
teatral) de la entrada del virrey al arco. En este sentido, écfrasis "are no mere rhetorical
showpieces but forge playful and intricate connections with the narrative and its
events," [and are presented] "for readers guided by the conventions of the epoch, as
illuminators of the text; they promise insight to it, they call for acts of interpretation"
narrativa55 analéptica particular del modo ecfrástico, a través del cual el relato va hacia
atrás en la historia:
Ideóse con estos fundamentos el Arco Triunfal que erigió a su feliz entrada el
obsequio de esta Santa Iglesia Metropolitana, en una de las puertas de su
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
55
También encontramos en los textos ecfrásticos modos de narración silépticos (que muestran dos
perspectivas simultáneas y contrarias), o prolépticos (que narran en un futuro). Ver Bearden, págs. 42-43.
! 68!
magnífico templo, que mira a la parte occidental, en el costado derecho, por
donde sale a la plaza del Marqués; desahogando en lenguas de los pinceles sus
bien nacidos afectos; y adornado con tan hermosa máquina la puerta que a tanta
dicha: manifestando en ella los cordiales regocijos con que recibía a su pacífico
Neptuno, que después de tantos marciales trofeos, viene a enriquecernos de
políticas felicidades. (372. Énfasis mío.)
ékfrasticas del texto. Según Mieke Bal, en un nivel narratológico esto puede ser
de la imagen no sólo en cuanto a los aspectos del focalizador de la narración sino que
también vivifica la imagen en un sentido más realista y en el caso del texto de sor Juana,
objeto y palabra ( y en este caso entre objeto visual y artefacto narrativo) es siempre
The word and object relation essentially enlivens a verbal image, which we can
call an ekphrasis. Bakhtin´s observations on the relationship between word,
object, and image represent not only the multiplicity of possible interpretations
in a narrative, but also the way in which these attempts at description vivify the
objects they describe. The work of visual art, by extension, calls forth these
varied interpretations, making the relation between word and image dialogic.
(43)
Sor Juana aplica todos los recursos del discurso ecfrástico y la relación dialógica
una idea. Creemos que esto se traduce en otra forma retórica en que sor Juana expresa
! 69!
su deseo, esta vez un deseo de presencia a través de la imagen proyectada en su texto.
fuera del claustro y como un sujeto público que vio y presenció la bienvenida a los
nuevos virreyes. Esto se hace aún más evidente cuando la monja critica (con énfasis en
la figura de la virreina) el retrato por parte de los pintores a los virreyes del primer
lienzo,56 relatando en pretérito: "En los rostros de las dos marinas deidades, hurtó el
sombras de sus luces, groseros por atrevidos, y cortos por desiguales” (375).
una persona." Además, proviene del griego ἠθοποιΐα (ethopoeia), que se compone con
ethos, que traduce ‘manera de hacer las cosas’; poiein, que significa ‘crear’, ‘imitar’,
‘describir’, y el sufijo -ia, que indica ‘acción o cualidad.’ De este modo, la etopeya es la
su primer status de obra por encargo y además la posiciona más allá de la mera
descripción ecfrástica, ya que en ningún momento se traduce como simple tarea para la
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
56!Octavio Paz en su libro Trampas de la Fe analiza de una manera muy convincente cómo sor Juana
habría concebido el "mundo como jeroglífico", así como las referencias clásicas que sirvieron de
inspiración para su arco triunfal. En sus explicaciones de la pintura del lienzo primero, Paz explica que los
virreyes aparecen metamorfoseados en las figuras de Neptuno y su esposa Anfitrite. Esta imagen del tablero
habría sido tomada por sor Juana del tratado de mitología de Vicenzo Cartario (Ver páginas 212-228). Ver
Anexo, Imagen 6. En el grabado se muestran a ambas figuras divinas del mismo tamaño. Llama la atención
la alianza simbolizada por el modo en que Neptuno abraza o sostiene a Anfitrite y que, a pesar de que éste
posee en la imagen más elementos simbólicos como el tridente, Anfitrite aparece yuxtapuesta al dios y no
como un elemento menor en la constitución del cuerpo emblemático, sino como su igual. Además pareciera
que su Belleza abarca a modo de primer plano la imagen. Del mismo modo quizás el lienzo primero del
arco sorjuanino presentaría a la pareja virreinal.!
! 70!
escritora y la desafía a extremar el discurso de alabanza a una reflexión sobre la
compleja tarea de representar el original sin alejarse de él, sin perderlo de vista en
medio del ambicioso acto retórico de búsqueda de metáforas perfectas: "Si acaso,
príncipe excelso, /cuando invoco vuestro influjo/ con tan divinos ardores/ yo misma no
me confundo; /si acaso, cuando mi voz/ se encomienda tanto asunto,/ no rompe lo que
una representación doble, tanto del objeto como del sujeto de la enunciación, idea que sor
Juana incluye hacia el final de la misma estrofa: "[S]i acaso, cuando ambiciosa/ a
vuestras luces procuro/ acercarme, no me abrasan/ los mismos rayos que busco" (402),
clara teorización estética sobre original y copia a la que sor Juana volverá con frecuencia
a lo largo del texto. La écfrasis le permite a sor Juana entonces un cierto distanciamiento,
una imagen aún no concebida y que desde esa mirada caleidoscópica propia de sor Juana,
iluminan otras ideas sobre el arte de la representación barroca. Tanto en esta estrofa del
poema ecfrástico como en el texto en general vemos un tratamiento paradógico por parte
! 71!
Imago Dei sorjuanino
imágenes alegóricas que decoran el arco triunfal haciendo mención al uso de los
emblemas, los cuales ella presenta bajo el nombre de jeroglíficos.57 Sor Juana se detiene
en el poder apelativo que tendría la imagen emblemática haciendo uso del testimonio de
Pierio Valeriano,58 quien aseguraba que los egipcios solían representar a dios usando el
círculo, por ser símbolo de lo infinito. Sin embargo, más allá de utilizar el lenguaje
representar, en el cómo hacer visible lo invisible, ante lo cual sor Juana resuelve: “Como
eran cosas que carecían de toda forma visible y por consiguiente, imposibles de mostrarse
a los ojos de los hombres (los cuales, por la mayor parte, sólo tienen por empleo de la
voluntad el que es objeto de sus ojos), fue necesario buscarle jeroglíficos, que por
Neptuno alegórico. El debate lo inició Octavio Paz en Las trampas de la fe (1982) donde
Paz, "la monja nombra a Egipto 31 veces, y los nombres de ríos, ciudades, y personajes
unas 51 veces más" (236). José Pascual Buxó afirma que habría un pretensión más
neoplatónica que hermética en la reflexión de sor Juana.59 Según Buxó, sor Juana seguiría
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57!Tal como indica John Maning en su libro Emblem, hay que recordar que cuando el emblema aparace en
el siglo XVI, por ser una representación simbólica también fue llamado "symbolum," por lo que disfrutó de
mayor libertad en cuanto a definición, razón por la cual nos encontramos con los derivados semánticos
como: jeroglífico, empresas, impresa, epigramas ilustrados, alegorías, enigmas, iconología.!
58!Autor de Hieroglyphica (1556).!
59!A esta visión se suma la perspectiva de Antonio Alatorre quien responde a la interpretación de Octavio
Paz y niega toda relación entre las posibles influencias del estudioso egiptólogo Kircher y sor Juana, cito:
"Son fantasías de Octavio Paz que, misteriosamente, han tenido una calurosísima y duradera acogida entre
! 72!
con las ideas de Santo Tomás de Aquino, quien establece una clara distinción entre
embargo no bastaría cualquier semejanza para obtener una imagen. Sin descartar ambas
reflexión de sor Juana como un movimiento doble del sujeto escritural: i) por un lado; de
así extremar la hipérbole de alabanza al virrey, ii) y por otro lado, de modo inconsciente,
recurrentes a lo largo del Neptuno así como en el marco general de su obra literaria.
Sor Juana usa el modo ecfrástico en defensa de la imagen, pero al mismo tiempo –
de representación del modelo. Ante esta premisa, tanto escritor como pintor sin importar
perspectiva y subjetividad respecto al original, copiando del reflejo del cristal, de la copia
guardar el Sol, monarca de las luces, no permitiéndose a la vista" (358). Es en ese intento
de copia o imitación del modelo en que el pintor-escritor intenta sacar una obra a todas
luces perfecta, siendo el artista –entonces– una especie de mediador entre esa perfección
inaccesible (divinidad) y el mundo, trayendo a la vista los colores de una imagen que
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los sorjuanistas al uso. Por otra parte, es pura fantasía ver en el Neptuno un manual de "educación" del
príncipe, "isisiano" o no (272). Sin embargo creemos que esta postura es muy extrema, ya que no podemos
asegurar que la monja no tuvo ningún contacto con alguna antología relativa a los estudios herméticos de
Kircher.!
60!Ver en Gilles Emery The Trinitarian Theology of Saint Thomas Aquinas (pp. 292-301).!
! 73!
habla directamente al logos. Es más, para sor Juana el hecho de que el artista cree esa
verosimilitud, pues según la monja "las fábulas tienen las más su fundamento en sucesos
verdaderos; y los que llamó dioses la gentilidad, fueron realmente príncipes excelentes, a
quienes por sus raras virtudes atribuyeron divinidad, o por haber sido inventores de
cosas" (359).
Así, como en muchos de sus poemas, en el Neptuno alegórico sor Juana también
destreza con que sor Juana revisa y combina los diversos corpus, creemos aquí pertinente
detenernos en una de las reflexiones más profundas que hace sor Juana desde un punto de
concepto de "imagen" según la sentencia Imago Dei derivada del Génesis bíblico que
indicaba que el hombre había sido creado en imagen y semejanza de Dios, la cual en
refiere a todo aquello que ventaja a los seres humanos por sobre otros seres, es decir, el
intelecto. Así, imagen tiene que ver con todas las formas en que el logos representa lo
divino. Dios es incorpóreo por lo que el concepto de imagen no podía ser relacionado al
cuerpo, sino más bien al alma, a lo inteligible. San Agustín ya lo había explicado, pero
santo Tomás de Aquino además aprovecha esas explicaciones para agregar una distinción
! 74!
clara entre los términos de imagen y semejanza, para ello se apoya en la noción de
modelo, y a la semejanza específica de la imagen. Sobre esta base Santo Tomás define
entonces los tres elementos que constituirían a la imagen: “La noción de imagen consta
de tres elementos constitutivos: 1) Es necesario que haya una semejanza; 2) que esta
semejanza salga o se tome de la realidad a la que se asemeja, 3) que salga de ella según
antes una semejanza es insuficiente para que haya una imagen; es decir, es necesario que
liga al ese modelo. En efecto, es preciso que uno se derive de otro, que la imagen sea
expresión de su modelo, o como bien dice sor Juana refiriéndose a las imágenes del arco:
"[Y] aunque iluminado [el príncipe] de tan regios colores y formado de tan divinas líneas,
¿quien duda que distará mucho de la perfección de su original?" (368. Énfasis mío).
(Dios/origen) puesto que expone los puntos en común entre filosofía neoplatónica y
teología. En este sentido, la imagen representa una realidad que la precede y por tanto hay
que especificar qué tipo de semejanza la relaciona al modelo (origen): "Para que haya
verdaderamente imagen no basta cualquier semejanza; tiene que haber una semejanza en
! 75!
q.35 a.1). Ese signo de la especie en el ser humano sería la luz de la inteligencia, que nos
semejanza; no en lo semejado. Por lo mismo, para sor Juana los jeroglíficos no son
"perfecta imagen" de los modelos sino que representan "similitudes" provisionales. Así,
A partir de esta reflexión ella aplica las palabras "delinear," "pintar," "dibujar"
repetidas veces para establecer conexiones entre ambas figuras (el virrey y el dios
Neptuno), así dejó –cito–: “que el pensamiento formase una idea en qué delinearlo"
(359). Al ser el virrey el "original", ella tendrá entonces la tarea de encontrar símbolos
A esta idea creemos pertinente añadir las definiciones del término "pintar" según
su uso en los siglos en los que vivió sor Juana, ya que nos permite comprender mejor las
reflexiones teóricas sobre el arte del esbozo que ella misma imprime en su Neptuno.
"Figurar en un plano, con el pincel y los colores, alguna imagen de cosa visible.” 2)
“Metaphoricamente vale describir por escrito u de palabra alguna cosa.” 3) "Se toma
algunas veces por imaginar a su arbitrio, o fingir en la imaginación a medida del deseo.
Latín. Effingere. Pingere." De estas definiciones la que más llama nuestra atención es la
imaginación a medida del deseo," al describir sor Juana una imagen antes de que esta
imagen como figura en potencia (esbozo, idea) o bien, como imago del deseo "porque a
! 76!
lo que no cabía en los límites naturales, se le diese toda la latitud de lo imaginado" (359),
ejercicio de tendencia barroca por excelencia, ya que sor Juana con ello abre y expande
los modos de alegorizar, deleitándose en: "La multiplicidad de significados que pueden
tener las cosas con respecto a este texto tan lleno de citas y alusiones que en lo que
"Introducción" 32).
que tanto Góngora como sor Juana, trazan dos formas distintas de ejercer la “mirada”
sobre el objeto que contemplan. Las imágenes y el vocabulario utilizado por ambos
poetas barrocos dejan entrever diferentes deseos: sexuales en las Soledades gongorinas y
epistemológicos en el caso de las silvas sorjuaninas del Primero Sueño, ejercicio muy
similar a lo que ella ya había expuesto en el Neptuno. Como señala Bergmann sor Juana
revela otro tipo de “mirada” que predomina en la mayoría de sus obras, una mirada
crítica, incorpórea y casi científica frente al objeto que describe, y vemos cómo tanto en
invisible, lo inteligible (alma), se debería a que sor Juana sigue y defiende los postulados
del maestro Carducho, para quien el arte del disegno se debe ejercer trazando primero la
línea, es decir, forma, el intelecto; catalogando a las emociones como parte de la materia,
! 77!
del color.61 Por lo mismo, la monja habría dado mayor énfasis a la idea, que a la
materialidad del arco, olvidando en la mayoría de sus lienzos nombrar hasta el detalle de
los colores, tan primordial para la retrato de una imagen. Sólo en el lienzo central
cerúlea," "blancas espumas," "dorados frenos," "verdes cernejas," "verdes cabellos" [de
las nereidas], "negro Etíope" [viento Euro]; del latín: "color de la pez" y "cabellos canos"
flores," "plateadas ondas," "mezclando con tornasolados visos las blancas espumas a las
palabras: "plata argentada, cerúleo tridente, cristalina, dorado, esmaltada cadena." Esta
monstruos marinos, sirenas y un delfín (como símbolo homérico del poeta protegido), y
que, como indicábamos en el capítulo anterior, haría mención a la misma sor Juana como
imagen de en uno de sus jeroglíficos, que sin duda son el componente más creativo del
monumento. Y a pesar de que críticas como Georgina Sabat de Rivers afirmen que el
programa del arco sorjuanino es un intento muy tradicional por parte de la monja,
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
61
Citamos del original en inglés: he refers to the learned painter´s avoidance of the "hechizo de los colores"
[bewitching quality of color] (247) in the practice of beginning with a sketch in black and white, and argues
that color is not necessary to painting. Like other painting theorists, he associates color with matter while
giving line (or disegno) the values of form and intellect. (Bergmann,152).
62!Para poder tener una idea de los colores que habrían decorado el arco hemos adjuntado en el Anexo, la
Imagen 8 que, a pesar de que corresponde a unos años después de la edificación del arco, forma parte de la
época y estilo Renacentista que sor Juana emulaba en sus lienzos. Creemos que esta pintura ejemplificaría
al menos la constitución espacial del primer lienzo, que es donde la monja incluye mayor detalle los
elementos de la pintura, como el caso de los monstruos marinos y los colores cerúleos, verdosos, plateados
y blanco-espuma. Además, la imagen rescata la importancia de la figura femenina, que habría sido también
inspiración para los pintores del arco sorjuanino, y enfatizada en el lienzo primero.!
! 78!
creemos que en sus metáforas simbólicas encontramos una diversidad de mensajes que
y lo divino. Por ejemplo, en los imagos que crea para sus basas e intercolumnios del arco
ella apela más al arte del ingenio que a la simple configuración nemotécnica del imago
barroco. Por lo que se trataría de emblemas de gran agudeza. Creemos posible –tomando
diestra "un cielo a quien arrebatan unas manos" (396), ¿cómo interpretamos esta imagen
sin recurrir a la teoría del símbolo? Es más, ¿es posible imaginar esa imagen sólo como
idea? ¿Cómo habrá sido pintada e interpretada por los artistas que decoraron el arco? En
emblemática anterior a la escritora. Y, aunque era muy común incluir manos en el cielo,
la cuales siempre sostenían algún elemento en concreto, aquí lo que postula sor Juana es
metáfora simbólica. Unas manos que agarran todo el cielo, es decir, algo no tangible,
celestial y divino del cielo, sor Juana agrega una noción más filosófica y valórica al
emblema, que representaría, sí, un riesgo por parte del gobernante, pero con el propósito
Es más, a través de esta idea de delinear con palabras una imagen del original –sin
llegar a representarlo directamente– sor Juana introduce sin censura una valiosa reflexión
sobre modelo y copia, así como la idea del proceso mismo de escritura concebida como
! 79!
un trazo, como un conjunto de líneas capaces de unir extremos que antes parecían
distantes: "Ya queda ajustada la grande similitud y conexión que hay entre nuestro
expresión sin censura). Proponiendo el esbozo y la pintura como lugar seguro desde el
cual confeccionar su mundo simbólico y político: "El adorno de este tablero sólo miró a
cotejar con los debidos respetos y merecidos aplausos, los retratos de Sus Excelencias"
(377).
De alguna manera el modo en que un escritor crea una imagen verbal y al mismo
imagen como, por ejemplo, el hecho de que la imagen exista o no en alguna dimensión de
realidad, ya sea literaria o no. Por otro lado, la écfrasis como modo retórico permite una
época. No por nada sor Juana enfatiza que "aunque esta manera de escribir está tan
aprobada con el uso (...) en las divinas letras también tiene su género de apoyo el uso de
las metáforas y apólogos" (359). Ante lo cual concluye la monja en que es el lenguaje
simbólico es el único capaz de expresar las virtudes del virrey ya que contendría en él
mismo dicha dualidad discursiva que liga lo moral con lo visual y que permitiría expresar
(356), concluyendo en que "no habrá sido fuera de la razón el buscar ideas y jeroglíficos
escrituras como en los jeroglíficos egipcios o en las armas y estandartes de los pueblos de
una "ciencia o arte" emblemático (Praz 82). Sin embargo, eso no impidió que "los autores
tratados se centraron en la relación de los dos elementos componentes del género que ya
centradas en las virtudes morales. En otras palabras, los emblemas en ese entonces ya no
conceptos internos de los académicos" (Arranz García y Gómez 191). En este sentido, la
invención del emblema barroco permitió la relación entre imagen y ethos, así como
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
64
Además buscaron definir las características y funciones de ambos elementos por separado. La primera
seria de normas es la que impone el artista italiano Paolo Giovo a mediados del XVI, en las que se refería a
los componentes gráficos de la impresa; dichas normas, consistieron en:
1- En cuanto a la forma, éste propone una justa proporción del alma y el cuerpo de la empresa (o emblema).
2- En cuanto a contenido, indica que no sea tan obscura que nadie pueda decifrar ni tan vulgar como para
que cualquier hombre la entienda.
3- En cuanto a la imagen gráfica se recomiendan imágenes hermosas y llamativas como astros, animales, y
elementos de la naturaleza ; y se deben omitir las figuras humanas.
! 81!
Dicha etapa de diversificación, popularización de la imagen simbólica es la que
llega como influencia a los circuitos académicos de Nueva España. Tal como indica
Arranz, el emblema barroco pasa a ser imagen que suple al concepto, o bien, concebida
como "ilustración de una metáfora" (Arranz García y Gómez 191). De este modo, la
artísticas más ingeniosas durante el seiscientos. En definitiva, eran las imágenes las que
constituían la materia y eficacia de los emblemas, ya que sus mensajes debían entrar por
los ojos. Razón por la cual muchos emblemistas aplicaron el criterio de "dificultad
hermetismo que impidiera acceder al mensaje. Sin embargo, y a pesar de que esa
"dificultad" había sido ciertamente restringida por algunos,65 bien es cierto también que el
emblema nunca fue concebido como ejercicio de interpretación poco desafiante, tal como
Maning afirma sobre dichos tratados: "The darkness [mysterious] of these books is often
greatly exaggerated. But the emblem was never meant to be obvious" (20). Coincidimos
los elementos naturales una forma creativa para la propuesta de sus imagos. De este
modo, es posible encontrarnos con emblemas que superan las reglamentaciones y con ello
una forma de interpretar una imagen simbólica según una determinada tradición, por eso
creemos que cuando nos enfrentamos a textos como el Neptuno, lo que debemos hacer es
también como una forma de concebir una experiencia estética en todas sus dimensiones
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
65!Muchos sacerdotes jesuitas habrían inlcuso llegado a rechazar las figuras jeroglíficas en las insignias,
pues consideraban que su significación no respondería a la propiedad de su naturaleza, sino a mera
imaginación.!
! 82!
interpretativas, en otras palabras, lo que debemos hacer es: "to place emblems into a
context of way of thinking and ways of feeling, ways of conceptualizing what we are and
explica que los emblemas son "Metáforas Symbólicas" (261). Tomando en cuenta esto,
cuando sor Juana nos advierte que hablará con alegorías y símbolos, nos está
introduciendo esa dimensión doble del discurso que elaborará a lo largo del texto y
Es más, sor Juana insiste en la idea de que el verdadero saber no consiste en aquellos
discursos "sutiles" y "vanos,"67 sino en el sano empleo que haga el lector de su facultad
intelectual, y con ello, por supuesto, se refiere a la virtud del ingenio que se necesita para
descifrar dichos símbolos: "[P]ara que se honren estos colores mitológicos de haber, con
Pero siguiendo con Tesauro, en el mismo libro él hace énfasis en el carácter ético
que eleva al emblema junto con la literatura ecfrástica como técnicas innatas del poeta,
por su capacidad natural de crear metáforas simbólicas con las que se absorven sentencias
morales:
[M]uy verosimil conjetura hace la misma naturaleza, la qual aviendo dado a los
ingenios humanos el modo de explicar sus conceptos por vía de symbolos y
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
66!Como acercamiento crítico al símbolo tomaremos las ideas de Paul Ricoeur, quien propone un análisis
del símbolo a partir de la teoría de la metáfora, ya que la función metafórica del lenguaje permitiría apartar
el aspecto no lingüístico del símbolo y analizarlo a través de un espectro de contrastes. Un aspecto
importante de la teoría de la metáfora son las relaciones que pueden establecerse entre sentido literal y
sentido figurativo ya que dichas relaciones nos proveen una base para establecer la semántica y
características del símbolo. Tal como ocurre con la metáfora, el discurso lingüístico del símbolo siempre se
referirá a algo más, a otra cosa, que no se encuentra explícita sino que hay que inferir a partir de relaciones
o contradicciones. Ver Ricoeur, Paul. Chapter "Metaphor and Symbol" (45-66)!
67
Como dice en su soneto Finjamos que soy feliz: " No es saber, saber hacer/ discursos sutiles, vanos;/ que
el saber consiste sólo/ en elegir lo más sano." (OC, Tomo I, 13-16).
!
! 83!
palabras, también enseñó a juntar las palabras con los symbolos; y principalmente
los á los Poetas, sagacilisimos imitadores como lo tengo dicho. ¿Y qué otra cosa
son las imágenes de Philostrato, que Emblemas compuestos de figuras, y palabras
para significar conceptos morales? [...] ¿Qué falta a los Apólogos de Esopo para
ser verdaderos Emblemas? Teniendo la figura significante, y la palabra que aplica
a la figura, con documentado significado. (263. Énfasis mío)
Por último, queremos recalcar que al comienzo de su texto sor Juana se refiriere a
un equilibrio simbólico con tal de que sus lienzos sean comprendidos por todo público
(por los "entendidos" y por el "vulgo"). No obstante, la monja no mantiene ese equilibrio
obscurecimiento del mensaje emblemático sobre todo en sus jeroglíficos. Es más, como
y sociales de Nueva España, mensajes dirigidos para a quienes podían entender alegorías
del poder. Dichos mensajes no fueron bien recibidos por todos quienes la rodeaban. Es
ella se refiere al arco como una gran ofensa según su confesor, uno de sus más críticos
enemigos, quien estimaba que ella habría escandalizado la palabra al haber "edificado a
Como hemos dicho antes, los jesuitas eran una indiscutible influencia social
autoridad en la sociedad de aquel entonces. Sin embargo, y tal como Alatorre explica "no
es que los jesuitas, en general, fueran adversos a Sor Juana" ("Sor Juana y los hombres",
s.n). El Padre Calleja, gran amigo de la monja, era muy influyente en Madrid y él mismo
le habría encomendado el arco triunfal, sin embargo, el Padre Núñez de Miranda era un
fanático de la santidad y bastante estricto con las monjas en cuanto a los votos de
! 84!
castidad, pobreza, obediencia y clausura. Núñez de Miranda nunca aceptó el hecho de
que sor Juana guardara conexiones personales con el mundo de la corte. Por lo mismo es
que hubo conflicto cuando apareció el Neptuno alegórico, condenándolo como un texto
escandalizado al ver a Sor Juana que pasaba de su encierro monástico a ser poeta oficial
de la corte de los virreyes. Pero el más visible en censura fue el Padre Núñez, quien no
toleró las alegorías que posicionaban a la monja como sujeto fuera del convento, y como
consejera política del nuevo virrey. El caso es que sor Juana años más tarde se enfrentó a
su padre espiritual y lo hizo por escrito. Esto se enmarca en una de las tantas muestras de
defensa a la libertad creativa por parte de la escritora y que con la escritura del Neptuno
ideológicos desde sus primeras exhibiciones como escritora oficial, actos similares
también a muchos pasajes de la Respuesta en los que sor Juana defiende la sabiduría
como un derecho tanto para hombres como para mujeres. Sobre este tema Alatorre
explica que desde el Neptuno alegórico y, con ello, desde la llegada de María Luisa
Manrique de Lara (futura amiga y protectora de la monja) sor Juana ya había hecho varias
otras cosas "mundanas," todas ellas desaprobadas y criticadas por su confesor: “La poesía
posible con el que se le daba en sus series de villancicos religiosos, con temas tan
Además, agrega el sorjuanista que el hecho que María Luisa alentaba a la misma
sor Juana a crear dichos textos "Poniendo en sus manos, muy probablemente, los libros
! 85!
que había traído de Madrid" (s/n), libros que nutrían la imaginación, y el repertorio
belleza, y lo divino, y que sigue explorando cada vez que el lenguaje simbólico y la
metáfora se lo permiten.
de la imagen, y que en algunos casos sor juana presentará desde sus posibilidades no
únicamente materiales sino también poéticas. Por ello, creemos que en dichos intentos de
discusión filosófica y política sobre los roles del género femenino y masculino que
! 86!
Capítulo IV
un mensaje privado y una perspectiva personal sobre el poder. En este sentido el Neptuno
alegórico puede ser leído entre otras cosas como un tratado político. En su habilidad y
agilidad para elaborar agudas referencias sor Juana revisa las diversas modalidades del
discurso retórico y posiciona otra cosmogonía del saber. Así, de modo similar a lo que
ocurrió con monjas intelectuales de la Edad Media como Hildegard Von Bingen y los
movimientos de beatas durante la primera mitad del Renacimiento español, sor Juana
propuso otra lectura del mundo. A pesar de que se vio constantemente enfrentada a la
diferenciación que ejercía la metrópolis (por ser criolla) y a las exigencias de una
sociedad colonial (por ser mujer letrada), aún así ella construye en el Neptuno alegórico
una identidad femenina frente a lo europeo, refutando así "cualquier duda de que la mujer
! 87!
La "Razón de la fábrica," sección del texto que nos ocupa en este capítulo, fue
dedicada a los virreyes y su comitiva, a los cultos de la Iglesia y a los artistas encargados
para la construcción y decoración del arco. Escrita en prosa, esta cumple con elementos
retóricos a partir de los cuales sor Juana introduce, revisa y persuade a su audiencia sobre
las bases morales para un buen gobierno.68 Siendo también un texto ecfrástico, en esta
sección ella describe los ocho lienzos y los seis jeroglíficos, cada uno con una descripción
continuar con una tradición humanista de artistas oficiales del estado y de la Iglesia a
quienes se les encargaban este tipo de textos alegóricos. Sin embargo, creemos que ella
insertó en este género un sello propio al incluir discusiones retóricas relativas al arte
aquí aprovechamos para hacer un paréntesis sobre lo que entendemos por original en el
caso de una obra por encargo como el Neptuno alegórico. Si bien muchos críticos
obstante que el problema con este tipo de crítica es que desacredita toda obra por encargo
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
68!La historia durante la colonia [siglos XVI-XVIII] fue vista entonces como "una rama de la retórica, [que]
debía cumplir con tres objetivos básicos: enseñar comportamientos morales (docere), entretener (delectare)
y provocar sentimientos de repudio o de admiración (movere)" (Rubial García, "La crónica religiosa" 327).!
69
He aquí algunas de las impresiones que recopila Alberto Salceda en su Introducción de las Obras
Completas de sor Juana (tomo IV, 1957); por ejemplo, Juan León Mena escribió refiriéndose al arco: "es lo
que menos vale de lo escrito por sor Juana". Más adelante, agrega que Marcelino Menéndez Pelayo explica
que los símbolos y jeroglíficos de obras como el Neptuno alegórico "no eran más que un curioso
documento para la historia de las costumbres coloniales y un claro testimonio de cómo la tiranía del medio
ambiente puede llegar a pervertir las naturalezas más provilegiadas" y cómo Manuel Toussaint aseveró que
el Neptuno alegórico está "preñado de citas en latín y escrito en prosa barroca que nadie entiende". (OC, p.
xxxvii).
! 88!
por ser cercana al poder, cuando toda obra en sí es subordinada a un tipo de poder, sea
éste la academia, el estado o la ideología misma del autor, en este sentido: "La
originalidad de una obra no se puede medir desde su autonomía, sino desde su función y
solamente como diálogo en el tiempo, sino con los textos" (Galán 21).
A sus veintinueve años, sor Juana acepta el reto de tan alta encomienda y trabaja
alrededor de dos meses en la confección del arco en el que no sólo presenta al nuevo
virrey, sino que también le brinda consejos políticos y le exige la agilización de los
asuntos pendientes en la ciudad. Pero, lo que llama más nuestra atención –razón que ha
motivado el análisis de este capítulo– son los personajes femeninos que justifican el
argumento mítico del arco; a quienes sor Juana introduce más allá del simple decoro
Se trata de personajes que también la inspiraron para la creación de dos jeroglíficos de los
quien más adelante sor Juana termina estableciendo una poderosa amistad.
más de veinte páginas dedicadas a Isis, la diosa egipcia de la sabiduría. En ella, nos dice,
convergen todas las artes y ciencias, ya que es Isis el signo mismo de la sabiduría: "Tuvo
la sabiduría esta nomeclatura de Isis, entre los varios nombres que le dieron los antiguos"
(366). De este modo y tal como lo indica Arenal: "Si Erasmo escribe un tratado del
príncipe cristiano, sor Juana confecciona en el Neptuno alegórico un tratado del príncipe
Isisiano" ("Del emblema al poema" 24). Y es que sor Juana a lo largo del texto celebra a
Isis cada vez que puede equilibrando así las relaciones de poder entre lo másculino (dios
! 89!
Neptuno) y lo femenino (Isis y otras diosas). Presentadas desde sus relaciones dialógicas,
las divinidades derivarían todas de un solo principio: la razón, cuyo génesis radicaría a su
vez en la sabiduría de Isis, elevada en el arco sorjuanino como inventora de las letras y
[T]an celebrada fue aquella reina de Egipto, a quien Diódoro Sículo con tanta
razón elogia desde los primeros renglones de su Historia, [...] Un libro entero
escribió Plutarco de este asunto; Piero Valeriano muchos asuntos; Platón muchos
elogios, el cual en el libro 2 de Legib; tratando de la música de los egipcios, dijo:
Ferunt, antiquíssimos illos apud eos concentus Isidis esse poemata. (sor Juana
362)
De este modo, sor Juana revisa y reelabora el mito de la genealogía del dios
Neptuno –en parte–para explicar sus vínculos con la diosa Isis, argumentos suficientes
para presentar al nuevo virrey como símil de un dios sabio y clemente; en otras palabras,
como gobernante ideal. El primer argumento que usa sor Juana en su retórica de alabanza
la Laguna lo emparentaría con el dios romano de las aguas. Nos dice además sor Juana
sobre la genealogía de Neptuno "fue este heróico príncipe hijo de Saturno y hermano de
Júpiter" (360) y como éste era rey del cielo, quedó para Neptuno el imperio de las aguas,
estrechos e islas. 70 Esta es la una de las pocas referencias que sor Juana hace sobre el
padre de Neptuno en todo el texto; haciendo desde aquí en adelante un marcado énfasis a
la descripción del lado materno de su genealogía. Continúa entonces ella con el segundo
argumento, explicando que la madre de Neptuno habría sido la diosa Opis o Cibeles, "la
cual es lo mismo que Isis, por representar estos nombres a la Tierra, a la cual llamaron
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
70!Así lo explica la misma sor Juana citando a Conti (Natal): "Hic cum Iovis socius, el adiutor fuisset in
bellis post Saturnum e regno depulsum, iactis sortibus de totius mundi imperio, mare, el omnes insulas,
quae in mari existunt, tenere cum imperio sortitus est Neptunus" (360).!
! 90!
Magna Mater, y creyeron ser la madre de todos los dioses" (360). La monja divaga
llegando a la conclusión de que por ser ésta sinónimo de sabiduría, los antiguos la habían
nombrado de distintas formas: "Apuleyo la llama Rea, Venus, Diana, Belona [...] Diódoro
Sículo dice que Isis es a la que llamaron Luna, Juno y Ceres; Macrobio afirma no ser sino
Lo que plantea finalmente sor Juana es que fue a través de Isis la forma en que los
inteligencia, y que por ende, nos diferencia como seres humanos de otros seres. Inspirada
por ideas neoplatónicas y sincréticas, sor Juana propone así un Imago Dei pero a partir de
modelos femeninos de virtud divina, al ser Isis signo de sabiduría (virtud máxima) sería
también el signo por medio del cual el ser humano se identificaría con lo divino. Lo más
sorprendente es cuando sor Juana –utilizando una referencia de Jacobo Bolduc–, explica
que los antiguos habrían denominado de diversas formas a la sabiduría con tal de dar
Simón el Mago" (366). Tal como Sophia significa sabiduría, las palabras ennoia y
epinoia, fueron comúnmente usadas por los gnósticos, estas significan pensamiento e idea
respectivamente y ambas palabras son femeninas. Por lo que parece atrevido que la
monja "atribuya un sexo al Espíritu y que ese sexo sea precisamente el femenino" (Paz
250), coincidiendo con los gnósticos y herméticos, tan combatidos por los Padres de la
Iglesia. Como decíamos en capítulos anteriores, sor Juana habría conocido estas ideas
! 91!
neoplatónicas y herméticas a través de los tratados sincretistas de Kircher.71 Así afirma
que la esencia del saber, es decir el espíritu o idea, es también femenino, ideas sin duda
heréticas. No obstante, ella las matiza con una referencia etimológica en la que traduce el
nombre de la diosa como dos veces hombre, "duplicato nomine hebraeo Is" (sor Juana,
366). Siguiendo con Bolduc, ella explica: "Pero ese nombre de Isis no fue de Sabiduría
como quiera, sino de la de Heber y Misraím [...] Declarando bastantemente ser lo mismo
Misraím que Isis, cuando ésta representaba sólo a la sabiduría" (366). Y aquí la monja
vuelve a complejizar la idea, ya que Isis es signo del hombre, pero también "representa
bíblico, por tanto los fundadores de Egipto [Heber y Misraím] y tutelares de las ciencias
Son estos los argumentos herméticos que sor Juana utiliza para urdir otra
genealogía del saber, donde posiciona lo femenino como génesis y principio del que
deriva la sabiduría y el intelecto. Así, la imagen de Isis se multiplica como espejos en los
lienzos. Minerva y Venus son algunos de esos reflejos. Pero antes de analizar los lienzos
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
71!Aunque no lo nombra directamente en su Neptuno alegórico, la monja debe haber tenido acceso a sus
libros, ya que la imaginería simbólica desde la cual rediseña a la diosa egipcia es muy similar a lo que
Kircher ya había postulado en sus textos herméticos.! Ver imagen 1 (anexa) Isis como Magna Deorum
Matris. En la imagen se presenta a Isis como nomina varium, y aparecen los mismos nombres de diosas con
los que sor Juana nombra Isis (Proserpina, Ceres, Cíbeles, Venus, Minerva, etc). Ver Anexo, Imagen 4.
Además la diosa aparece con un conjunto de símbolos relativos a las ciencias las artes y la música. Por otro
lado aparece en la lista de la derecha un desglose de Isis símbolo de la tierra, la luna y como maestra. Otro
modelo simbólico que sor Juana seguramente sigue del alemán Kircher, es el que presenta en su libro de
1670 Ars Magna Sciendi. El libro en sí consiste en el intento del jesuita por abarcar un saber universal y
enciclopédico, ya que en la portada (ver Imagen 2) se muestra a una mujer sosteniendo un tarjón con una
lista de materias indecifrables, y arriba de ella cuelgan quince esferas cada una con la inscripción de una
ciencia, entre ellas: teológía, matemática, física, ética moralis, lógica, metafísica, ect. Otros elementos
circundan a la deidad femenina del saber en el emblema de Kircher, como ojos dentro de un círculo de luz
que emite rayos, y una oreja también dentro de un círculo, ambos como símbolos de lo "sensible y lo
inteligible" o bien como todo aquello no evidente a los sentidos, que desde una perspectiva neoplatónica,
representarían lo inteligible o conocimiento divino. En este sentido y al filtrar en el Neptuno, dicha
imaginería kircheriana y neoplatónica en la que se daba un espacio simbólico relevante a lo femenino, lo
que hace sor Juana es " emplear estrategias discursivas como extra-literarias para redefinir a través de la
memoria, la inteligencia, y la imaginación los conceptos de género y poder" (Bouvier 44).!
! 92!
dedicados a estas diosas, veremos los argumentos con los que sor Juana emparenta a Isis
con Neptuno. Para ello, sor Juana hace uso de una cita de Natal donde se menciona a Isis
como Magna Mater, es decir como madre de todos los dioses y por ende también de
que explica cómo en los juegos circenses llamados Neptunalia los antiguos honraban en
secreto al dios del consejo y del silencio Harpócrates (hijo de Isis).73 Valiéndose, por
llamó San Agustín" (360). Así la monja perfila a Neptuno no como el dios temperamental
que solía ser, sino como dios del Silencio y del Consejo. Neptuno ejerce ahora la virtud
de la sabiduría, aunque heredada y no propia, ya que ésta desciende de Isis. De este modo
y haciendo énfasis en el linaje materno nos dice la monja: "[S]iendo de ordinario las
costumbres maternas norma y ejemplar (...) [al ser Neptuno hijo de Isis], claro está que no
le corría menos obligación el de ser sabio "pues el nacer de padres sabios, no tanto es
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
72!Citamos el texto original donde Arenal explica que sor Juana: "put forth a conception of creation and
culture in which knowledge flows from a female principle; in which both sexes appear at each wordly level
as dynamic and reasonable subjects; in which matrimony becomes patrimony and metaphors of giving birth
and of maternal and paternal nurturance supplant those of bloody battles and of exclusively masculine
genealogies" (181).
73!Ver imagen anexa emblema "D´el Silencio" de Andrea Alciato. Imagen que habría influído a sor Juana
para la relación Horus-Silencio.!
! 93!
proponiendo como símbolo de la sabiduría a los peces74 y estos por pertenecer al mar
(gobernado por Neptuno) vinculan al dios romano con el dios del silencio egipcio:
La razón de haber los antiguos venerado a Neptuno por dios del Silencio, confieso
no haberla visto en autor alguno de los pocos que yo he manejado; pero si se
permite a mi conjetura, dijera que por ser dios de las Aguas, cuyos hijos los peces
son mudos, como los llamó Horacio:
O mutis quoque piscibus
donatura cyni, si libeat, sonum. (361)
Vemos cómo sor Juana presenta sus argumentos con perfecto sincretismo entre
(Pitágoras). Aprovecha así esas posibilidades del lenguaje analógico que ostentaba la
problemáticas sobre las nociones de poder, conocimiento y linaje. Pero quizás lo más
atractivo en su discurso sea el hecho de que postule una concepción del origen de la
cultura y las ciencias, insertando una dimensión maternal en los discursos mitopoéticos, y
que pareciera tener como objetivo "to counter the patria (fatherland/hisland), a sort of
algunas teorías que la vincularían con otras figuras femeninas novohispanas. Nos
referimos a las ideas propuestas por Stephanie Merrim en su libro The Spectacular City,
Mexico, and Colonial Hispanic Literary Culture (2010). En él la sorjuanista postula que
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
74
Agrega la monja que los peces habrían sido símbolo del silencio en honor a Pitágoras, "por ser maestro
del silencio" (361), y que los egipcios habrían adoptado la figura del pez como símbolo del silencio según
Piero Valeriano.
! 94!
Guadalupe, 75 ideas que no quedan fundamentadas en su análisis, ni menos cuando
analizamos los criterios sincréticos de sor Juana aplica en el Neptuno alegórico respecto
imposible ser novohispana sin ser guadalupeana76, sobre lo cual diferimos absolutamente.
(franciscanas, dominicanas y jesuitas).77 Proponemos entonces que siendo sor Juana muy
se reservó ella muchas veces a la mención explícita a Guadalupe, ya sea por criterio
la Virgen en la colonia. 78 Por otro lado, sabemos que ella recibe una educación
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
75!Citamos del original:"The syncretic, all-purpose Isis, finally, helps crack the code of a major enigma. I
refer to SorJuana's apparently scant devotion to the Virgin of Guadalupe, hallmark of the plural Mexico,
nucleus of creole cultural nationalism, rallying point of the festival city" (Merrim 188).!
76!Si bien sor Juana invoca a María en el silogismo de Isis madre de Neptuno, Isis madre de todos los
dioses, por ende, Madre de Dios. No creemos pertinente aquí incluir intenciones criollistas de devoción a
Guadalupe por parte de la monja, a pesar de que sí coincidimos con Merrim que sor Juana más de una vez
vincula a la Virgen María con Guadalupe:"Almost obsessively, though, Sor Juana does write about the
Virgin Mary, often invoking her as a paragon of knowledge and hence as an idealized selfmask. She most
frequently confers on Mary the attributes of Guadalupe" (Merrim 188). No obstante, y como justificaremos
más adelante, en el caso del arco triunfal pocas son las referencias que nos permitirían afirmar estas
conexiones obsesivas que Merrim menciona.!
77!A diferencia de la Virgen de los Remedios (introducida por Cortés), "la Criolla" o "la Morenita"
(Guadalupe) se habría aparecido directamente a un indígena (catechumen) recién convertido. Desde esta
"aparición" se difunde entonces la creencia en sus poderes curativos y milagros, y de paso, la creación de
textos y poemas de alabanza (Ver Kennet páginas 312-315). Coincidimos con Kennet en que los criollos
habrían visto en la Virgen de los Remedios una imposición evangelizadora, mientras que Guadalupe
simbolizaría una apropiación de las imágenes devocionales por parte de la población indígena, por haberse
aparecido directamente a ellos y que, por tanto, pasó a ser una forma menos impuesta de la fe Católica.
Visión que habría compartido quizás la Décima Musa.!
78 !Nos referimos a las prácticas de traspaso simbólico que la imagen de la Virgen María ya había
experimentado desde el proceso de conquista hasta las apropiaciones criollas, lo que Arenal y Stacy Schlau
explican muy bien en su artículo "Thin Lines, Bedeviled Words: Monastic and Inquisitional Texts by
Colonial Mexican Women", el cual citamos a continuación: "From very early in the conquest,
Malintzin/doña Marina, Cortés’s ‘tongue’ and the Virgin of Guadalupe, the Aztec Tonantzin transformed
into Mary, became the allegories of a conceptual game that demonstrates how powerful the role of
! 95!
principalmente jesuística, orden que apoyó la difusión estratégica de la creencia en
(Kennet 315). En este sentido, nos preguntamos: si por parte de su misma orden nunca
tuvo restricciones en cuanto a alabar a la Virgen de Guadalupe, ¿por qué entonces no deja
explícitos sus vínculos con la madre de Neptuno en su texto de 1680? Si hubiera querido
la monja, podría perfectamente haber incluido su nombre entre los tantos otros que le
dedica a la diosa Isis. Sin embargo ella no lo hace. Es más, vemos cómo en poemas
por Cortés a los indígenas) y que termina siendo reemplazada por Guadalupe. Sor Juana
explica ese proceso de apropiación criolla diciendo: "La compuesta de flores Maravilla,
/divina Protectora Americana/ que a ser se pasa Rosa Mejicana/ apareciendo Rosa de
Castilla" (OC. vol I.310). Más allá de enaltecer la imagen de Guadalupe por simbolizar
en sí misma una virtud (digamos, por ejemplo, la "inteligencia" que simboliza Isis en el
Neptuno), lo que hace más bien sor Juana es halagar a la figura del jesuita y criollo
americana por medio de la palabra: "pues no menos le dan traslado hermoso/ las flores de
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
woman’s body was in demonstrating orthodoxy or heterodoxy. The Indian woman who gave birth to a
mestizo son and the Indian goddess who became a mestiza Virgin together embodied national autocthonous
identity at the same time as they represented the socio-religious opposition of purity and carnal danger"
(35). A partir de estas reflexiones, proponemos que en el caso del Neptuno sor Juana no habría utilizado
dichas referencias explícitas a Guadalupe-María quizás por formar mayormente parte de un proyecto
evangelizador ortodoxo que a un traspaso simbólico heterodoxo, y que tanto le interesa indagar a la monja.
Sor Juana propone en su Neptuno Isis-María como formula sincrética y transhistórica, tema que sigue
abordando en otros textos filosóficos, pero que primero profundiza en su Neptuno.!
! 96!
tus versos sin iguales, la maravilla de tu culta pluma" (310)79. Creemos por tanto que la
monja incluso cuando tuvo la oportunidad de alabar a Guadalupe por algo más allá de la
En este sentido, lo que sugerimos es no encasillar a sor Juana bajo un solo enfoque, ya
que si bien la multiplicidad de aspectos que recorren su obra permiten ligar sus símbolos
a más de una teoría, no hay que olvidar sus criterios únicos y personales como escritora,
Creemos que sor Juana precisamente por ser muy consciente de las manipulaciones que
justificar sus visiones de lo sagrado y lo femenino, siempre prefirió incluir sus propias
versiones sobre la madre de Dios, tema que desarrolla profundamente en el texto para el
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
79!Otro aspecto relevante de este poema es que sor Juana no la nombra, sólo la invoca en su símbolo (las
flores que le dieron imagen), además al alabar las cualidades cultas del jesuita sor Juana apoya entonces
una evangelización humanística de los indígenas por medio de la poesía y la palabra. En este sentido sor
Juana enfatiza las prácticas cultas y humanistas que conllevaban la aplicación de una transferencia
simbólica más compleja que la adoración por medio de la imagen.!
80 El mismo Kennet en su artículo explica cómo la imagen de la virgen fue difundida sistemática y
estratégicamente en los lugares en los que ya había una devoción por divinidades femeninas, y sin ninguna
intención de incorporar los antiguos mitos en la nueva imagen de devoción. Es más todo los aspectos
sincréticos que se encuentran en el traspaso simbólico de la Virgen en América, fueron pensados más allá
de incorporar en él imaginario indígena, de eliminar todo vestigio de devoción anterior, y desarticular
entonces antiguas prácticas sagradas: "There is evidence to suggest that a minority of rurally-based
Franciscan missionaries may have planted images of the Virgin Mary in places where goddess cults were
particularly strong. A picture appears, an ‘apparition’ follows, converts gather. The majority of Franciscans
despised this manipulation, for it ran counter to orthodox teaching. They were not syncretistic in their
approach—if anything they believed that a detailed knowledge of Indian culture was needed only in order
to dismantle previous beliefs systems with as much skill as possible—a ‘first layer’ activity for
disempowering the past" (311).
! 97!
Los valores y la simbología de lo femenino en los lienzos
Sor Juana elige a Neptuno porque en él, nos dice, se encuentran "las proezas que
más combinación tuviesen con las claras virtudes del excelentísimo, señor marqués de la
Laguna" (359). La emblemática ofrece aquí una solución tentadora, por el hecho de que si
es posible concebir y ver una imagen, es posible entender cierto significado. En otras
palabras, para sor Juana la forma más apta de imaginar la grandeza del virrey es a través
este dios al establecer su vínculo con la diosa de la sabiduría Isis. Lo que importa
extremos cognoscibles:81
Como vemos, un aspecto que se desprende de este afán retórico de sor Juana (el
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
81!En su Arte de ingenio, tratado de la agudeza Gracián crea un compendio de todas las formas de artificio
en torno al "concepto" que los escritores españoles venían ejercitando y popularizando a través de
corrientes culteranas y conceptistas barrocas. El escritor cataloga las formas de sutilezas en el discurso y
postula la acepción del término (concepto) como sinónimo de pensamiento al ser ejercicios de la mente:
"Son los conceptos hijos más del esfuerzo de la mente que del artificio; concíbense acaso, salen a la luz sin
magisterio" (145). De este modo, el concepto es obra del pensamiento; pero no de cualquier pensamiento,
sino aquel fabricado con ingenio; y que sorprenda al lector por su agudeza, es decir, que contenga cierto
desafío o dificultad. Es decir, la agudeza propone una epistemología, una forma de entender, ya que a
través de la dificultad del juego conceptual se activaría el pensamiento:"[E]ntendimiento sin conceptos es
sol sin rayos, y cuantos brillan en las celestes lumbreras son materiales con los del ingenio" (Gracián 145).
82!Según Aristóteles es cuando se aplicaba el método en que el segundo término era al primero lo que el
cuarto era al tercero. Citamos del latín: "Proportionem dico, quando similiter se habeat secundum ad
primum ac quartum ad tertium."(Poética, 205). Asimismo nos explica Aristóteles sobre la analogía: "!
! 98!
que es uno de los recursos de la retórica barroca que Gracián tanto recomendaba. Según
el jesuita español esta retórica consistía en lograr una "primorosa concordancia" o una
"armónica correlación entre dos o tres cognoscibles extremos, expresada por un acto de
¿Qué otra cosa es ser hijo de Saturno, que es ser hijo de la real estirpe de España,
de quien descienden tantos reyes que son deidades de la tierra? Es también Su
Excelencia hijo de Isis, esto es, de la sabiduría del Señor Rey Don Alonso, el
Sabio por antonomasia, llamado así por la excelencia de sus estudios,
especialmente matemáticos. Misraím español, a cuyos compases parece que
obedecía el curso de las estrellas. (369)
al marqués como Neptuno y a Neptuno como hijo de Isis (Harpócrates), nos parece
ira y fuerza que lo caracterizan como dios de las aguas. En este sentido, cada uno de los
motes del arco indicará una virtud que el virrey debe tener y cultivar; y las pinturas
en que el gobernante debe ejecutar el poder. Para ello, sor Juana repasa un vasto
repertorio mitológico de la Antigüedad clásica.84 Hay que notar aquí que sor Juana en esta
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Entiendo por analogía el hecho de que el segundo término sea al primero como el cuarto al tercero;
entonces podrá usarse el cuarto en vez del segundo o el segundo en vez del cuarto;
y a veces se añade aquello a lo que se refiere el término sustituido" (Poética, 205).
83!La primera especie de concepto, nos explica Gracián, es el que resulta de una armonía y agradable
correspondencia entre sí de dos extremos. De este modo, el acto de unir los extremos se traduce en una
"obra grande del ingenio" (151), por eso Gracián introduce la agudeza como tropo de la tradición clásica,
explicando cómo los antiguos aplicaron el método del silogismo, "con el que sellaron la agudeza
remitiéndola a la valentía del ingenio" (145).
!
84
Sor Juana inserta citas de Homero, Virgilio, Ovidio, Plinio, Macrobio, Natal, Cartario y Textor, los que
no siempre son citados de forma directa. Sobre esto y tal como indica Pascual Buxó: "En este sentido sor
Juana también heredó del maestro de la sutileza Gracián, para quien los conceptos de acomodación tanto de
verso antiguo como de texto autorizado debían ser incluidos por medio de alusiones en las que se exprima
la esencia del texto pero "apenas apuntándolo," ya que esto se traducía en muestra de excelente
! 99!
temprana etapa ya demostraba un espíritu reformador de valores del género, ya que no
rol de los personajes femeninos. Lo que veremos a continuación con el ejemplo de dos
lienzos.
y Minerva para la elección de un nombre para la ciudad de Atenas. Sor Juana comienza la
descripción citando a Conti (a quien ella llama Natal).85 En este episodio, Neptuno ofrece
un caballo y Minerva un olivo, saliendo ella victoriosa ante los jueces. Lo interesante es
cómo sor Juana ofrece una interpretación diferente sobre la victoria de la diosa. Mientras
Conti reproduce la simple idea de que Minerva buscaba distraer a los ciudadanos del arte
de la navegación para que se dedicaran al cultivo de la tierra, sor Juana da énfasis a los
valores y acciones que se refieren al autodominio emocional, los que se ven puestos a
Juana en la competencia, Neptuno hace aparecer el caballo anunciando guerras con sus
oliva daba verdes anuncios de paz en sus floridos ramos" (389. Énfasis mío). La versión
propuesta por sor Juana presenta el símbolo animal e impetuoso del caballo en
disputa entre Neptuno y Minerva sirve a sor Juana para representar y aconsejar la victoria
de la sabiduría por sobre la fuerza física, en otras palabras, el dominio por medio de la
razón. Sor Juana aprovecha dichas virtudes femeninas para proyectar a su gobernante
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
conocimiento e ingenio tanto del autor como para el lector capaz de inferir la cita o referencia conceptual
utilizada (Lectura barroca 134-37). !
85
Citando a sor Juana: "como lo refiere Plutarco, a quien sigue Natal con toda la escuela mitológica"
(388).!
! 100!
ideal, para ello, rediseña la genealogía de Minerva y explica que ésta sería hija de
Neptuno en vez de hija de Júpiter, factor que le atribuye al dios una victoria indirecta. El
lienzo fue titulado con el mote Dum vincitur, vincit; es decir, Neptuno sería un vencedor
tradicional del mito que simbolizaba al dios de las aguas con la imprudencia y crueldad;
delineándolo ahora como un Neptuno que logra el vencimiento de sí mismo por medio de
la razón. Es más, en la sección del poema "Explicación del arco" dedicada al lienzo VII,
sor Juana hace hincapié en estos mismos elementos, lo que nos permite reafirmar mejor
Llama sor Juana a Minerva "Tritonia" por ser protectora del lago Tritón en Boecia
(Arenal, "Del emblema al poema" 23 ). Cuenta el mito que Minerva es la hija de Júpiter y
Metis, su primera esposa. No obstante, cuando éste descubre que su esposa engendraría
hijos más poderosos que él, engulle a Metis. Por eso sor Juana dice que es "dos veces
concebida". Ahora, la frase "nunca nacida" se debe a que Minerva sale de la cabeza de
Júpiter tras ser golpeado éste por el hacha de Vulcano. Minerva- Atenas, sale de la cabeza
armas de guerra adquieren en sor Juana los símbolos con los que combate por la Paz,
! 101!
presentándola como la divinidad protegida por la Gran Madre (la tierra), siendo Minerva
emocional, virtudes que la escritora enfatiza con las siguientes relaciones semánticas:
sor Juana adjetiviza cada concepto del mito para enfatizar las virtudes de la diosa:
furia de Aquiles. Nuevamente sor Juana presenta a Neptuno sabio y clemente, finalizando
la alegoría con el conocido jeroglífico del cetro con una cigüeña. 86 A modo de
recordatorio nos dice la monja: "[L]os egipcios ponían en los cetros y reales insignias,
una cigüeña sobre un pie de hipopótamo, animal feroz y cruel, para dar a entender que los
príncipes han de anteponer la piedad al rigor" (382). De este modo sor Juana insiste en la
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
86!El original es de Erasmo en su Institutio principis christiani (1532) y popularizado por Horapollo, Piero
Valeriano y Ripa, entre otros.!
! 102!
visión de un gobernante pasivo y clemente87 pero sobretodo compasivo, agregando en una
pasivo y clemente sería, por sobre todo, inteligente y sabio gracias a la intervención o
mediación de las diosas. Vemos así cómo propone dichas modificaciones conceptuales a
través del replanteamiento valórico de las figuras femeninas del mito, tanto la diosa de la
guerra Minerva, como Venus, diosa del amor y la fertilidad, simbolizan ahora la
Si bien el arte barroco entra en escena para seducir por medio del artificio de la
desengaño; también éste propone subvertir los límites impuestos por la forma y la
tradición. Por eso, sor Juana deconstruye esa voz de la autoridad histórica de Conti
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
87!El famoso emblema de Alciato que menciona sor Juana fue el popularizado por Horapolo, Valeriano y
después Ripa (ver Anexo, Imagen 5). Sin embargo, recordemos que habría sido primero circulado en
Institutio principis christiani de Erasmo de Rotterdam (cap. I, 76). La sutileza de la monja es insistir en un
sentido profundamente cristiano de la clemencia, un claro llamado al nuevo virrey a que, como el dios
Neptuno, refrene el rigor como muestra de esa "vencida victoria" que no es sino una muestra de sabiduría y
piedad; como virtudes que combaten lo irracional para un buen ejercicio del poder. !
!
!
! 103!
constitución emblemática que le permitía aunar diversas tradiciones de pensamiento
(religioso, literario y filosófico). A partir de la revisión del mito, intenta recuperar el valor
configuración estética e ideológica del sujeto barroco, podemos afirmar que al reescribir
la fábula, sor Juana abre un nuevo campo para la interpretación valórica de la historia, y
nos hace renacer como lectores a partir de esta genealogía del saber matriarcal de Isis88,
personaje que evolucionaría más tarde en su ensayo filosófico Primero Sueño (1692).
virreyes recibían todo tipo de festejos por parte de la comunidad novohispana. Ahora
bien, aunque el rol de las virreinas estaba regido según las restricciones de género de la
época colonial –y, por tanto, supeditado al de su marido– sus intereses personales se
dejaron sentir en el ambiente cultural de la corte, siendo éstas muchas veces el espíritu
que animaba los saraos y festejos; así también, la presencia de estas mujeres se hizo sentir
también en las representaciones alegóricas para arco triunfales (Rubial, "Las virreinas
novohispanas" 9-11), siendo estas instancias una de las pocas en que las virreinas se
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
88 Ver Anexo, Imagen 4.!
89
Tal como explica Rubial en el mismo artículo, las virreinas apenas llegaban a México se dedicaba
absolutamente a la acomodación de su consorte en la casa real, lugar en el que pasarían gran parte de su
estadía.
! 104!
de la sabiduría. A esto hay que sumar dos jeroglíficos dedicados a la virreina. Estas
imágenes que muestran callando irían en los intercolumnios del arco: uno dedicado a la
etimología de su nombre María siendo el mar símbolo con que se cifra "todas las bellezas
en lo fabuloso" (399) y que "en lo verdadero es madre y principio de todas las aguas"
(399). En otro jeroglífico compara a la virreina con la diosa Venus, por ser el lucero de la
mañana, y al ser la virreina regente del mar anunciaba "serenidades a este reino" (401).
Tal como lo indica Paz, sor Juana conoció a María Luisa ya mujer madura, la
ello sor Juana estaba en la plenitud de su talento artístico. La condesa tenía casi la misma
edad que sor Juana ya que había nacido sólo un año después de la poeta (1649). Creemos,
como Paz, que la amistad de María Luisa fue tremendamente significativa y benéfica para
sor Juana ya que "no sólo le dio independencia y seguridad frente a sus dos hermanas de
San Jerónimo sino que le debemos varios poemas memorables" (259), entre estos los
Por supuesto sor Juana no fue la primera ni la única en dedicar parte del arco
triunfal a una virreina. Un caso similar es el del arco eregido para el conde de Moctezuma
(1696) encomendado al mercedario fray Juan de Bonilla Rodríguez quien dedicó uno de
abundancia "en su carro triunfal, coronada de flores, con una cornucopia de frutos en su
8). Otro clásico ejemplo es el del arco eregido al marqués de las Amarillas en 1755, en el
! 105!
cual se representó debajo del escudo nobiliario a su esposa Luisa María del Rosario de
Ahumada y Bruna acompañándo al virrey y recibida ésta por tres diosas. Todas
arco de sor Juana, al postularla como una belleza en un sentido neoplatónico, es decir,
En el cuarto emblema del primer intercolumnio de mano diestra sor Juana manda
que el mismo Mar, que significa su nombre" (400). Además ese Mar/María se lleva así
las miradas de todos. Al igual que los padres de la emblemática sor Juana incluye un
elemento decorado con ojos, siendo comunes en los emblemas clásicos los elementos
concretos como las prendas o manos con ojos, los que simbolizaban desde la figura del
espía hasta la incredulidad, sin embargo aquí lo que postula sor Juana es mucho más
abstracto que simbólico, cito: "Pintóse éste lleno de ojos, aludiendo a los que forma con
sus aguas" (400). ¿Cómo nos enfrentamos a esta indicación? ¿Cómo interpretamos la
imagen? En este caso, el valor lo asignamos tal como cuando leemos un poema, por lo
que deducimos que sor Juana busca en la emblemática no sólo proyectar una imagen
la imagen única, una especie de enigma poético donde se sincretiza de modo muy
tentador imagen deseada e idea, pero no cualquier idea, sino una idea de base filosófica.
Y aquí cabe recalcar una particularidad de sor Juana que se ve expresa en el diseño del
arco, el afán retórico con el que cada imagen arrastra al lector a profundas reflexiones
más allá de lo simbólico. Sor Juana extrema la imagen a imagen poética, es decir, una
! 106!
imagen imposible de materializar sin ser antes interpretada. Un mar que se lleva los ojos,
no es cualquier mar. ¿Qué es, entonces? El deseo de la imagen sólo nos invita a leerla,
neoplatónico sería símbolo del Intelecto, que atrae desde lo sensible, desde lo bello
expresado en el signo del mar a ese conjunto de ojos, instrumentos neoplatónicos del
intelecto (o peces mudos como diría la monja). La belleza conmueve y atrae así al alma
que se eleva al intelecto, en ese sentido "la belleza es inseparable del Intelecto como la
auréola de la tríada que arraiga en su profundidad real" (García Bazán 18). De este modo
sor Juana presentaría a María Luisa como otro reflejo de esa sabiduría femenina isisiana,
Pascual Buxó en su famoso ensayo "Sor Juana egipciana"90 explica las referencias
Primero sueño, aclarando que la monja ya habría manejado muy bien en él referencias
humanistas barrocos para reflexionar sobre la sabiduría. Lo que cabe preguntarse ahora,
tal como lo indica Buxó es qué clase de sabiduría era la que motivaba el argumento de
Creemos así que estos mismos argumentos filosóficos habrían ya sido parte del
corpus filosófico de la monja y por ende relevantes para comprender parte del argumento
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
90!El ensayo en general se centra en el posible rechazo de los sueños de la razón para conformarse con la
fe, y en la admiración que Juana Inés siente por la sabiduría y la unión de la naturaleza humana con la
divina.!
! 107!
del arco.91 Como continuador de la escuela platónica, Plotino (s.III) se dedicó en dos
Sobre la belleza sensible Plotino dirá: "no siendo más que imágenes y sombras que se
6, 3, 33). De este modo Plotino se pregunta qué es esa luz en la que brillan las virtudes,
concluyendo que es la Belleza la que precede al Bien; es el signo y reflejo del Bien a
Por lo tanto un alma (intelecto) que se eleva también crece en belleza. Así mismo,
sor Juana pondera los conceptos de belleza en sus jeroglíficos y los simboliza con
elementos alegóricos de lo intelectivo: los ojos formados por las olas en el primer
jeroglífico y la luz astral que alumbra el mar en el segundo. Para la monja, al ser la
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
91!Para más aspectos filosóficos y neoplatónicos en sor Juana, véase: «Sor Juana y la docta ignorancia »
ensayo de Juliana González. La autora realiza una breve exploración de los significados filosóficos y
particularmente platónicos y neoplatónicos que pueden defenserse en su lectura y en especial en obras
como el Primero Sueño; su Respuesta a sor Filotea de la Cruz y su Carta atenagórica.
92
Enéada I, 6 (1) –“Sobre lo bello”– y Enéada V, 8 (31) –“Sobre la belleza inteligible”–. En ellas, Plotino
se refiere a aspectos sobre la belleza y a lo que ésta implica: la percepción estética, el sentimiento de lo
bello, la contemplación de la belleza, la irradiación de lo bello en el Intelecto y, lo bello en sí que,
transportaría al alma contemplante hacia el Bien.
93
Francisco García Bazán en su artículo "Plotino y la fenomenología de la belleza", sintetiza muy bien la
teoría del neoplatónico: "En efecto, el alma acoge o se siente atraída por el ente bello y se repliega o
retrocede ante el feo: esto es así porque como ella procede de algo bello cuando percibe algo de su estirpe
(syggenés) o una huella, se contenta (khaírei) y se conmueve o emociona (dieptóetai-diaptoéo), lo ve como
algo propio y despierta el recuerdo de sí y de lo suyo. Es que al proceso psíquico descripto subyace la
semejanza (homoiótes). Se entiende por consiguiente que lo bello lo sea por comunión con una razón
divina" (11).
! 108!
Belleza sinónimo de Intelecto, aprovecha todas las posibles correlaciones estéticas del
del primer intercolumnio de mano diestra: "Fue el mar en el sentir de los antiguos, la
fuente de las más célebres y famosas hermosuras, de cuyas espumas salió la hermosa
Venus" (398. Énfasis mío). Sor Juana aquí, lo que hace es presentar al mar como uno de
los símbolos de la belleza del cual nace "todas esas hermosas comparaciones"(399), es
decir, todas las formas de nombrar lo bello que es finalmente el conocimiento divino. Sor
nombrar a todos los reflejos de Venus (399) que encuentran un símil en la virreina:
"Finalmente fue el mar una cifra de todas las bellezas en lo fabuloso, y en lo verdadero es
madre y principio de todas las aguas [...] Y como la excelentísima señora doña María
Luisa Manrique de Lara [...], admira el mundo mucho más que la fabulosa Venus todo el
imperio de la belleza"(400). Explicación que sor Juana extrema estéticamente con una
invocando a la diosa Venus pero ahora como "la más hermosa del firmamento" (400).
Ella es la que con rayos apacibles y lucientes anuncia el aparecer (nacer) del Sol. Sor
referencias a Claudiano y Virgilio, la monja nos dice: [Venus/astro mensajero] "El cual
! 109!
no solo es precursor del día en su nacimiento, pero alumbra y alegra la tarde [...] De
manera que este nobilísimo astro tan atento al sol en el oriente como en el ocaso, por lo
cual los egipcios lo ponían como símbolo del crepúsculo"(401). Aquí sor Juana liga la
mitología antigua con la etimología del nombre de la virreina, explicando las raíces
mitopoéticas relativas a María94 como señora, doctora y maestra del mar, es decir, como
refulgente estrella, la excelentísima señora doña María Luisa, en quien se hayan todas las
propiedades de lucero que anuncia con sus rayos serenidades a este reino; señora del mar,
pues su nombre en el hebreo significa Domina Maris, vel Doctrix, et Magistra Maris”
Es más, si unimos las refexiones anteriores sobre Isis como Ennoia, espíritu
neoplatónicas por parte de la monja. Recordemos que uno de los grandes aportes de
Plotino fue el de volver a libros como Fedro de Platón y analizar las dialécticas entre
alma e intelecto, estimando que "si a los dioses varones los identificamos con el Intelecto
y a las diosas con las Almas de aquéllos basándonos en que junto con cada intelecto hay
un Alma como socia" (Enéada III, Trat III 5, 139), reafirmando con ello ideas del
principio femenino (alma) como la co-credora del universo. Es más nos explica Plotino,
identificará con el Alma de Zeus. Un nuevo testimonio en pro de esta teoría es el de los
sacerdotes y teólogos, que identifican a Hera con Afrodita y llaman estrella de Hera a la
estrella de Afrodita (Venus) que brilla en el cielo"(139), ideas que sor Juana plasma en
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
94
En su edición del 2008 (Cátedra), Electa Arenal y Vincent Martin explican que sor Juana se habría
basado en argumentos de Sebastán de Covarrubias. Ver nota al pie página 187.
! 110!
sus versos para la virreina al simbolizarla como esa "refulgente estrella" (401) de la
razón.
Así pues, y retomando las reflexiones de Rubial, creemos que como mujer sor
Juana "se salía de los trillados tópicos de la belleza femenina y ofrecía como modelo a la
nueva virreina, un papel de guía, maestra y madre del reino" ("Las virreinas" 10)
situándola en un espacio poético del poder no menos significativo que el ocupado por el
poseía título nobiliario por linaje propio, al ser "princesa de la casa de Mantua y
undécima condesa de Paredes" (Rubial "Las virreinas" 5). Juana agrega que "no podía
venir este lucero clarísimo sino de España [...] Y más propiamente de Italia, [...] donde
tiene origen la noblísima casa de los señores duques de Mantua, aquella tan amada patria
de Virgilio" (401).
Al igual que Kircher, sor Juana correlaciona diversas materias, buscando puntos
impuestas sobre el rol de la mujer en la historia (reflexiones que madurarán en las cartas
temática para abordar otras cosas más allá de la petición oficial (el arreglo del sistema de
inventar al virrey como Neptuno, la escritora compone una alegoría que le permite tratar
otros temas más allá de los que se les habían originalmente encargado:
! 111!
profundos. Insiste que lo abstracto e ingenioso se relaciona con la inteligencia y el
intelecto. Abarca Sor Juana, por tanto, mucho más que las dos peticiones que le
encargan los oficiales de la ciudad. (97)
Cuando sor Juana dice que Neptuno es el dios del silencio egipcio, claro está que
cristiano" (Pascual Buxó, Lectura 325). Sin embargo, sor Juana no sólo propone una
visión erasmista del gobernante, sino que crea un corpus basado en una memoria histórica
diferenciada. Como mujer sabia de su época, sor Juana Inés de la Cruz propone otra
configuración valórica basada en un corpus sagrado, a partir del cual ella analiza el
ese gobernante ideal y persuadiendo al virrey sobre temas ético-morales. Así el arco
virtudes políticas (1680), ha tenido más discusión crítica que el de sor Juana. Muchos
estudios se han realizado a partir de los dos arcos, coincidiendo todos en la importancia
críticos se han detenido en las semejanzas con la que ambos escritores enfrentaron su
identidad criolla y sus puntos de vista sobre la cultura colonial de la época. Sin embargo,
lo que más llama nuestra atención son las diferencias entre ambos modelos simbólicos de
! 112!
los arcos. Al comparar los dos arcos triunfales vemos que, por un lado, el arco de
Singüenza y Góngora, desde una perspectiva jesuítica intenta retratar la historia del
según Nelson Bradley, “la aparición de la Modernidad" (106). En ese sentido sor Juana
nuevo génesis alterando la cosmología del mito, "by subversively encoding her true
theme" (Arenal, "Public Spectacle, Privatte Battle", 177). Tal como indica Electa Arenal,
el arco de sor Juana aún no ha sido analizado en sus dimensiones más críticas. Razones
por las cuales nos hemos propuesto hacer ese análisis y demostrar que el Neptuno
alegórico está lejos de ser un fiel programa ortodoxo como ha sido catalogado. Por lo
mismo, nos parece relevante seguir estableciendo diferencias que delinean el arco
de un lenguaje emblemático por ser éste el más adecuado para formular verdades
políticas y morales. No obstante, creemos importante destacar que, al hacer uso del
emblema como unidad alegórica, ella también replantea los valores impuestos por la
! 113!
tradición y propone su propia simbología del poder, tanto masculino como femenino, al
tiempo que cristaliza en la escritura la naturaleza efímera del arco triunfal, proponiendo
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! 114!
Conclusión:
en el Neptuno alegórico
Como sabemos, cuando nos referimos a los símbolos nos encontramos con un
palabras, un sentido alegórico; y como hemos visto en este trabajo de tesis, los símbolos
referencia al discurso retórico.95 En este aspecto la metáfora juega un rol central para
donde debemos delimitar el campo de análisis para los símbolos sorjuaninos en el arco
sorjuaninas sobre el "delinear" una idea y "trazar líneas que unan conceptos"; creemos
necesario como conclusión final ligar dicha reflexión con la idea de "fábrica" que sor
Juana propone en el Neptuno. Como sabemos, la palabra "fábrica" también puede ser
entendida como "confección," "invención" y, por qué no, como "alegoría." Al revisar
Covarrubias, todo cobra mayor sentido. Si bien la palabra fábrica aparece mencionada en
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
95!El discurso retórico recurre a tropos literarios tanto para rellenar aquellas lagunas del discurso; o bien,
para ornamentarlo y hacerlo atractivo para la audiencia. El primero de los casos corresponde a cuando
quien enuncia o escribe posee más ideas que palabras capaces de expresarlas, de modo que debe extender la
red de significados más allá del su sentido ordinario. El segundo caso correspondería a cuando el
enunciante, teniendo los conceptos muy disponibles, utiliza otros más figurados con el fin de seducir a la
audiencia, persuadiéndola. Ambos casos podemos verlos manifiestos en el Neptuno alegórico.!
! 115!
diversos artículos sin pasar esta misma a ser una definición en sí misma, entre los
mismo funcionaría como relato de otra cosa, como una meta-metáfora que ofrece un
sentido literal y otro implícito. Cuando interpretamos un texto, ambos sentidos son
conciliados una vez que otorgamos una unidad (modelo) a cierta dialéctica discursiva. En
otras palabras podríamos decir que, cuando nos enfrentamos tanto a símbolos como
una incoherencia en coherencia, en fin, buscar un punto de unión a dicha tensión entre
elementos, tal como sor Juana propone en su Neptuno alegórico al unir los extremos
“Razones que me movieron a delinear algo en las singulares virtudes de nuestro Príncipe,
en el dios Neptuno, en el cual parece que no acaso, sino con particular esmero, quiso la
erudita antigüedad hacer un dibujo de su Excelencia tan verdadero como lo dirían las
fue entendida como un tipo de tropo literario que se limitaba al juego de la sustitución
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
96 Aristóteles, proponía una definición de la metáfora como el uso comparativo de imágenes, ideas o
palabras. Modelo que fue luego reducido por Cicerón y Quintiliano, quienes afirmaban que la metáfora es
una simple comparación abreviada. !
! 116!
conceptual, 97 situando a la metáfora como una figura basada en el concepto de
represent a semantic innovation, does not bring new information" (Ricoeur 49). A estas
(Jackobson, Lacan, Freud, Derrida, Deleuze) afirmando que sí aporta nueva información.
reflexiones sobre la cualidad mudable del tropo, indicando que "en la comparación
[metáfora proporcional] resaltan más las perfecciones que se copian" (358). Es decir, la
metáfora es un medio por el cual se transforma algo, perfeccionándolo. Por ello, creemos
que sor Juana se adelanta al pensamiento crítico-teórico del siglo XX exponiendo con
Por otro lado, tomando en cuenta las teorizaciones previas de Covarrubias sobre
arquetipo y modelo, revisamos una vez más un extracto del Neptuno que ya hemos
Para sor Juana, entonces, la metáfora (o, sombras de lo fingido en que campea lo
verdadero) no puede reducirse al simple juego de nombrar unas cosas por otras, ya que
ésta le ayudaría a crear esa fábrica y "sacar la obra a todas luces perfecta" (359). Además,
sintagmática mayor. Creemos entonces que esta representación alegórica que explora sor
dichas teorizaciones corresponden a técnicas retóricas que sor Juana aprendió en sus
de los textos sagrados como la "alusión."100 Tal como explica Aída Beaupied en su
tratado anterior por medio de las alusiones intra y extra textuales que en ellos aparecen"
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
100 !Beaupied a su vez desarrolla esta tesis basada en las ideas de Robert Alter, quien en su introducción a
The Literary Guide to the Bible, explica la técnica retórica de la alusión: "The restrospective act of
canonization has created a unity among the disparate texts that we as later readers can scarcely ignore; and
this unity in turns reflects, though with a pronounced element of exaggeration an intrinsic feature of the
original text –their allusive character´" (13).!!
! 118!
(81). 101 Siguiendo estas ideas, podríamos entender la alusión como una forma de
dicotomías del discurso sugeririendo algo diferente, cambiando el sentido original del
breve aproximación sobre la teoría simbólica del uso de los mismos. El teórico
estructuralista Michel Riffaterre nos explica algo esencial para comprender mejor las
determinación de que Neptuno es sabio, sor Juana se valió de varios subtextos que van
en:
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
101
En su estudio Beaupied aplica la idea de la alusión según John Hollander, para quien esta se traduciría en
el ejercicio de un "eco poético" que subvirtiría el significado orginal por medio de la creación y
proliferación de metáforas. El lenguaje entonces subvierte el original (al prinicipio fue el Verbo), y
relaciona estas ideas con los postulados derrideanos sobre la palabra diseminada y que según Beaupied
encontramos ejemplos de ello en obras de sor Juana como El Divino Narciso, El Neptuno alegórico y en el
Primero Sueño: "Esa es entonces la escritura de la diseminación, de la cual el sofista es uno de sus
portavoces y Eco una de sus representaciones simbólicas (...) La obra de sor Juana entra a formar parte de
esa búsqueda y diseminación de las metáforas, al establecer un diálogo intertextual con las obras sagradas y
paganas" (81).
102 Aquí nos referimos específicamente a las ideas de Hollander sobre el eco poético: "The rebounds of
intertetextual echo generally, then, distort the original voice in order to interpret it" (Ctdo. en Beaupied 81).!
103!El resto de los principios de los subtextos son: i. poseen su propia gramática basada en derivación
tautológica, ii. ofrecen una lectura metalingüística sobre de lo que aborda el texto; iii. constituyen una
autoridad sobre cualquier aspecto narrado del texto, v. tienen sus propios motivos y temas, externos a los
temas del texto mismo (Rifatterre 54-5).!
! 119!
i. Referencias a los mitos de la Antigüedad Clásica (Plutarco, Ovidio, Natal-Conti). En
especial, recordemos los casos de los lienzos séptimo y cuarto que analizamos en el
capítulo IV y en los cuales se presenta el mito grecolatino con cambios simbólicos que
permiten justificar la relación de Neptuno con la sapiencia y la clemencia, las que además
simbólica, pasando a ser uno de los ejemplos máximos del texto en cuanto a agudeza
barroca. Al mismo tiempo creemos que las sutilezas que teje la escritora en el argumento
derivan no sólo de dicha intertextualidad y constante alusión a una cultura antigua, sino
que también derivan de una constante tensión entre conceptos y elementos visuales. El
texto se refiere al diseño de emblemas, los que a su vez expanden los paralelismos y por
tanto crean una memoria lingüistica y visual como cuando contrapone los atributos
visuales del laurel verde de la esperanza de Minerva con los caballos de guerra de
Plotino). Tal como vimos también en los capítulos III y IV, en los jeroglíficos sor Juana
presenta la figura mitológica de Isis como madre de las ciencias y las artes, y madre
además de todos los dioses. Estas teorías derivan de los textos de Apuleyo y Kircher,
texto. Por otro lado, como alusiva intertextualidad, sor Juana teje las ideas neoplatónicas
de Plotino sobre la "belleza" como virtud divina y relativa al logos en el argumento de los
! 120!
Al incluir sor Juana en sus emblemas y jeroglíficos relaciones silogísticas entre
sustantivos, adjetivos y símbolos, crea subtextos que como ecos paralelos al argumento
1º silogismo:
simbólica del virrey, el virrey queda representado en el arco como heredero de una
sabiduría antigua de corriente materna y simbolizada por medio de todas las diosas del
arco. Así como concluimos en el capítulo IV, sor Juana a través de esas correlaciones
mitología de Isis. Dichas ideas no son mera coincidencia ya que para sor Juana esta diosa
errante es la fuente de la cual emanan todas virtudes superiores del conocimiento, ideas
2º silogismo. Isis es la diosa epicia de la sabiduría y madre de todos los dioses, Neptuno
es Harpócrates; por tanto Isis es madre de Neptuno.
Por otro lado, al crear el silogismo Isis - Sabiduría- Madre, lo que hace sor Juana,
3º silogismo. Isis es madre de todos los dioses como María es madre de dios, por tanto
Isis =María, siendo ambas representaciones del conocimiento divino.
! 121!
apropiación conceptual: la virreina, al llamarse María Luisa, es también una
representación de conocimiento divino al traer promesas de paz al nuevo gobierno.
En fin, lo que hacen los subtextos en el Neptuno es crear, por una parte, una
repetición enfática de analogías. En segundo lugar, lo que permiten estos subtextos es una
como vemos en la expansión de sentidos que expone sor Juana en el texto todo apunta a
Las ideas sobre del conocimiento como principio femenino ya las había trabajado
sor Juana en textos dedicados a la figura de la virgen María como los Ejercicios Devotos
entre 1676-1690,104 –y que veremos desarrollado más tarde en la loa el Divino Narciso
la escritora aprovecha de reciclar y aludir en sus obras. Para sor Juana la Virgen María es
principio doble: femenino y masculino. Ya que María como madre de Jesus llevaría en
ella misma a Dios; así como Isis lleva en sí misma a Harpócrates, dios niño del silencio.
En este sentido María sirve de subtexto final que permite reafirmar las ideas paganas y
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
104
Para el análisis de estos aspectos en los villancicos, ver Tesis de Magíster: Janice Shewey."Hacia el
dinamismo, la creatividad y la feminización de la divinidad: Los villancicos asuncionistas de sor Juana Inés
de la Cruz" (UVIC, 2010). Tal como indica la investigadora, en muchos villancicos de la monja se
desprenden temáticas y elementos en favor a la figura femenina de la Biblia, la Virgen María,
presentándola como un personaje de valentía, erudicción y activa participante de la creación divina.
! 122!
heréticas de sor Juana sobre dios como principio femenino. Por lo que los silogismos del
intención en sor Juana por femenizar a dios en sus obras por medio de la simbología de
Isis105 y presentar a esta diosa egipcia como una representación antigua del principio
When sor Juana unites the Virgen Mary to the God-head, she emphasizes the
partnership [...] Queen of Wisdom, Mary conceives the eternal Word [...] If Christ
becomes the image and likeness of man, Mary becomes the image and likeness of
God the Father, who is also her son. Sor Juana’s presentation of the theme is quite
different from that of Patristic Tradition. Mary is not simply a vessel, she is the
Creator, and the Author, related not so much to primeval forces of nature, or to
mother earth as to the wisdom of original creation ("Sor Juana: Speaking the
Mother Tongue," 96).
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
105 !Ideas que sor Juana elabora basándose en dos textos de la Antigüedad en los que aparece la diosa Isis
helenizada: El asno de oro de Apuleyo y El Tratado sobre Isis y Osiris de Plutarco, obras que cita
directamente en el Neptuno alegórico.
106 Nos referimos a!sus frecuentes correlaciones entre Espíritu-Dios-Femenino. Por ejemplo, en el Divino
Narciso nos encontramos con similares ideas que claramente fueron ideas heréticas y paganas para su
época. En esta obra sor Juana busca demostrar la manifestación del Espíritu Santo como principio
femenino, principio que simbolizaría a la diosa Isis. Este mismo empeño de feminizar a dios se ve expuesto
en otras obras de la monja, como en sus "Ejercicios devotos" dedicados a la Virgen María, sobre los cuales
Arenal afirma que el interés de sor Juana por la Virgen va más allá de una exhortación devota, y que se
debe más bien a su esfuerzo por justificar a la virgen como modelo que la autorizara a la hora de escribir.
! 123!
Y aunque estas referencias a María como la co-creadora del universo no son
propias de sor Juana107, lo que sí cabe recalcar es que dichas alusiones en el Neptuno
justificaría muchas ideas paganas y gnósticas que se escapaban a los preceptos cristianos
ortodoxos. Por lo que sor Juana no sólo aprovecha de crear espejos y similitudes entre
Isis y María, sino que más allá de ello trata de reconstruir una génesis del logos desde una
rama mitológica que excede el mito cristiano, y que en sí pareciera sugerir un emblema
belleza como forma de manifestación del logos (lo intelectivo) a las que sor Juana alude y
contrastes con textos posteriores como el poema en forma de ensayo filosófico Primero
Sueño (1692), en el que se evidencia no sólo esa tradición filosófica neoplatónica que ya
Concluimos entonces que sor Juana no sólo crea una compleja red de subtextos
alegóricos con tal de transmitir símbolos e ideas heréticas en una época de restricciones
cristianas y ortodoxas, sino que además ella reivindica con afán revisionista cierta
de la veta materna en dicha construcción epistemológica, y por tanto, tarea de todo sabio
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
107
En su artículo "Los Ejercicios de la encarnación en sor Juana Inés de la Cruz: Sermones de Imitatio
Mariae" Beatriz de Alba-Koch discute y explica los origenes de dichas problemáticas marianas. Según de
Alba-Koch, sor Juana habría sido impactada no sólo por Loyola, sino tambièn por la mariología medieval
sobre la Virgen, aplicando en sus Ejercicos de devoción "la regula convenientiae, regla del superlativo
propia de esta mariología" (163), denominando a la Virgen como "Reina Soberana", "Absoluta Señora de
todo lo creado" (sor Juana, 475 ctdo en Alba-Koch).
! 124!
sería el reconocerlo. Como afirma sor Juana: "Siendo de ordinario las costumbres
maternas norma y ejemplar por donde compone las suyas, no sólo lo tierno de la infancia,
sino lo robusto de la juventud, mal se percibían en ellos las prendas de que nunca se
adoraron" (362).
Ahora bien, ¿qué categoría cumplen los textos emblemáticos dentro de este
del argumento sorjuanino, el emblema mismo puede ser entendido como un gran subtexto
visuales que van reafirmando conceptos y símbolos propuestos por una subjetividad
artística y que forman ese cuerpo enfático de mensajes, que es el emblema. Tal como
explica Riffaterre:
De este modo, como lectores del Neptuno debemos sumar a esas correlaciones
retóricas sorjuaninas, los aspectos visuales del cuerpo emblemático (arco) que despliegan
subtextos que reafirman a su vez esos silogismos, planteando ese proceso de lectura como
algo en constante adquisición de sentido. Ante esto, cabe preguntarse, ¿es el emblema un
emblema puede ser entendida como un proceso de lectura, entonces el emblema también
debería ser analizado desde esa arista. La teoría literaria moderna ha centrado su análisis
en las relaciones desprendidas entre imagen y palabra en el emblema, las que dan como
! 125!
resultado no sólo un significado, sino también un sentido y un significante a través de la
relación entre lo inteligible y lo sensible. Por lo tanto, cuando analizamos los tipos de
como huella fantasmal e imaginaria habla al alma (la idea), y el alma explica una
sentencia moral que a su vez también es respaldada en el cuerpo del emblema a través de
símbolos. Así, nos enfrentamos como lectores a una verdadera máquina fijadora de
opera desde la adquisición de sentido en diversos niveles. En este sentido, los emblemas
habrían ayudado a los lectores "in their personalized interpretation of texts" (Russell
178).108 Por ello, cuando sor Juana en la "Razón de la Fábrica" nos dice "que para sacar la
obra a todas luces perfecta, forma [La Naturaleza] primero diversos modelos y ejemplares
en que enmendar y pulir lo que no fuere tan perfecto" (358-9), lo que hace la monja es
teorizar no sólo sobre temas estéticos sobre el original y la copia, sino además sobre el
literatura como algo siempre previo, como un pretexto. Así pues, vemos expuesto a lo
largo del Neptuno cómo sor Juana inserta todas esas correlaciones, proponiendo el uso
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
108!De ahí que la teoría de la recepción sea fundamental para este tipo de análisis, ya que es la única que se
centra en las relaciones dialógicas entre el receptor y el emisor para la búsqueda y adquisición de sentido,
como también las relaciones entre propósito del mensaje y sus posibles interpretaciones según los
horizontes de espectativas del emisor y receptor.
109
Reflexiones que sería interesante seguir explorando en otros trabajos de investigación, ya que se trata
pues de una especie de reflexión meta-escritural, o alegoría de la escritura como ensayo, experimento, o
bien, una reflexión sobre el acto mismo de edición.!
! 126!
del símbolo y la alegoría como una forma de encontrar sentido a través de ese "delinear"
una palabra que, como signo de la escritura, se inscribe en ese juego de adquisición de
delineamiento y pretexto, esto puede ser matizado con los postulados derridianos sobre la
escritura entendida como "huella." Lo que sugiere Derrida es que se conciba a la escritura
como un momento antes del lenguaje y entonces al "lenguaje natural u original" como
algo no intacto o intocado por la escritura, sino como un lenguaje que en sí mismo ha
sido siempre una escritura" ("El afuera es el adentro", 113). En este sentido, los trazos y
delineamientos a los que se refiere sor Juana serían una teorización sobre un momento
Creeemos, por lo tanto, que los emblemas y epigramas barrocos, tal como sor
metáfora viva como diría Ricoeur, es decir, una metáfora que exige el desciframiento de
dimensión almática del texto como en la dimensión corporal del símbolo que lo compone,
barroca. Gracián entendía la metáfora como interpretación que exigía una "armónica
entendimiento" (150). Tanto las ideas de Gracián como las de Ricoeur o las de Riffaterre
! 127!
el lector haría sería ensamblar dichos elementos, unir los extremos para lograr una
interpretación; apropiándose así el rol clave de este tropo, ya que la metáfora no existe
por sí sola sino "in and through an interpretation" (Ricoeur 50). De este modo el lenguaje
manejó a la perfección.
referencias ante las cuales debemos preguntarnos por qué sor Juana elige ciertos
argumentos y cuáles omite de los diversos corpus sincréticos que manejó, dejando así
Por último, concluimos que por medio de alegorías y alusiones, lo que hace sor
Juana es revisar una tradición y como humanista neoplatónica de su época eso significaba
también una revisión de los valores planteados por la mitología pagana. Como sabemos,
la práctica de incorporar un texto por medio de alusiones es tan antigua como la escritura
no sólo la tradición clásica, sino también todas las tradiciones religiosas a su alcance. Por
eso, cuando Emanuele Tesauro se refiere a los emblemas como un arte hermético,
denominando a cierto tipo de emblemas como "imágenes mirables," resume en ello dicha
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
110 !Tal como indica Jean Seznec a comienzos de la era cristiana la alegoría y la alusión cumplen la función
vital de facilitar el estudio de los textos clásicos, y son los tropos los que terminan helenizando los mitos
grecolatinos paganos "it forces [mithology] the gods back into a matrix of allegory, decking them out again
into the exotic finery which they had shed with such difficulty at the end of the earlier period [...] from the
fiftheenth century on, the gods had been gradually regaining their incarnation in human shape" (256).!
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pretensión neoplatónica de absorsión de un conocimiento heterodoxo, repleto de
con una proliferación de textos que intentaron fijar la memoria simbólica de una época.
Sor Juana continúa con esa tradición y, es más, la desarrolla con maestría. Tal como
hemos visto en los capítulos de esta tesis, sor Juana no sólo reflexiona sobre el poder de
carácter ecfrástico del Neptuno alegórico, ya que tanto su capacidad retórica para
permitieron a sor Juana una flexibilidad temática y un perspectivismo desde el cual ella
Tomando en cuenta los posibles aportes que se perfilan con este trabajo de
análisis, proponenos entender el Neptuno alegórico como "obra umbral" es decir, como
fundamento y génesis de las bases epistemológicas con las que sor Juana se apropia de
enorme riqueza intertextual que caracteriza a sor Juana como una escritora que, a pesar de
! 129!
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Anexo
Imagen 1: Estructura del Neptuno alegórico de sor Juana Inés de la Cruz, por Georgina
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Imagen 2: Manuscrito del Neptuno alegórico. Extraído de: Cervantes Virtual.
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Imagen 3: Sebastián de Covarrubias Horozco. Cent 3, Emblema 62. Emblemas Morales.
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Imagen 4: Isis, “Madre diosa”. En: Anastasio Kircher. Madrid: Siruela, 1990. p. 218.
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Imagen 5: Emblematum Liber. "D´el Silencio". Ottava Rima. Alciato, 1548.
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Imagen 6: Neptuno y Anfitrite. Grabado extraído del libro de Vicenzo Cartari: Le imagini
de i dei de gli antichi. Venecia, 1571
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Imagen 7: Triumph of Neptune standing on a chariot pulled by two sea horses. Mid-third
century AD. Musée archéologique de Sousse.
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Imagen 8: Sebastiano Ricci. Neptuno y Anfítrite (1691.1694). Madrid: Museo Thyssen-
Bornemisza. Óleo sobre canvas.
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