Optimizar las redes Wi‑Fi para los dispositivos Apple
Poner nombre a las redes Wi‑Fi
Dependiendo de tu empresa, es probable que quieras crear varios identificadores de conjunto de servicios (SSID) para diferentes propósitos, como una red para los trabajadores contratados o una red para invitados. Dado que los SSID generan tráfico de gestión, asegúrese de no crear más de los necesarios para garantizar tiempo de transmisión para los datos. Tres o menos SSID sería un objetivo recomendado.
Ten en cuenta estas prácticas recomendadas para identificar tus redes:
No crees demasiados identificadores de conjunto de servicios (SSID): Al planificar nombres de red, considera la posibilidad de usar un SSID único para todos los dispositivos con características similares. Cada SSID activado en una red sobrecarga un poco más el tráfico de gestión y reduce el tiempo de transmisión disponible para los datos. Para un rendimiento óptimo, se recomiendan tres o menos SSID. Para ayudar a mantener reducido el número de SSID sin dejar de proporcionar a los usuarios acceso a las redes deseadas, se puede usar un sistema de control de acceso basado en funciones, disponible en muchas implantaciones de redes LAN inalámbricas.
Evita el uso de SSID “ocultos”: Las redes ocultas son redes Wi-Fi que no difunden su SSID. A veces, se hace referencia a estas redes como redes cerradas, lo cual es incorrecto, ya que el SSID se omite en el marco Beacon. A las redes no ocultas se les denomina en ocasiones como redes de transmisión, porque el nombre del SSID se transmite en el marco Beacon. Como los usuarios tienden a moverse con sus dispositivos Apple, los SSID ocultos suelen retrasar el tiempo de conexión a la red y entorpecer el rendimiento de itinerancia. Además, ocultar el SSID no aporta ninguna ventaja de seguridad, ya que los atacantes pueden obtener el SSID de cualquier otro tráfico de gestión, como solicitudes y respuestas de sondeo. Los SSID ocultos incluso pueden aumentar el consumo de batería en el tiempo de los dispositivos en comparación con los SSID visibles, por lo que se reduce la duración de la batería del dispositivo.
Conseguir una buena cobertura Wi-Fi
Nota: Este contenido está enfocado al diseño de redes Wi-Fi en Estados Unidos. Las restricciones y los requisitos del diseño de red pueden variar en otros países o regiones.
A la hora de diseñar una red, es fundamental tener en cuenta tanto la distribución física del centro educativo u oficina como el uso que hacen los usuarios de esos espacios. Por ejemplo, en empresas pequeñas, es posible que los usuarios se muevan por el edificio a lo largo del día y que se reúnan en salas de conferencias o en despachos. En este caso, el acceso a la red corresponde a los siguientes tipos de actividades:
Actividades que necesitan poco ancho de banda, como la consulta del correo y los calendarios, y la navegación por internet.
Actividades que requieren mucho ancho de banda (por ejemplo, usar herramientas de colaboración por voz o videoconferencia, como FaceTime, WebEx o Cisco Jabber)
Cuando los usuarios desarrollan actividades que necesitan mucho ancho de banda, la cobertura de la red Wi-Fi pasa a tener la máxima prioridad. Un posible diseño de la red Wi-Fi en este tipo de entorno podría incluir un pequeño número de puntos de acceso en cada planta para proporcionar cobertura a las oficinas, pero deberías considerar también más puntos de acceso para las áreas en las que se reúne un mayor número de empleados, como las salas de conferencias. Los puntos de acceso deben proporcionar una capacidad adecuada para las actividades que usan mucho ancho de banda, combinando una buena ubicación con una potencia de salida suficiente. El número de canales disponibles también es importante, por lo que debes considerar los rangos de frecuencia de las redes Wi-Fi. Hay dos opciones:
5 GHz: Siempre hay como mínimo ocho canales disponibles que no se solapan, aunque este número varía en función del proveedor y del país. Como los hornos microondas, los teléfonos inalámbricos y muchos otros dispositivos comparten las mismas frecuencias que la banda de 2,4 GHz, la banda de 5 GHz se adapta mucho mejor al uso Wi-Fi. Dado que las señales de 5 GHz no atraviesan paredes ni otras barreras tal y como hacen las señales de 2,4 GHz, lo que da lugar a un área de cobertura más pequeña, las redes 5 GHz resultan óptimas para una alta densidad de dispositivos en un espacio cerrado, como una clase o sala de reuniones.
2,4 GHz: Hay 11 canales hábiles en Estados Unidos. Muchos de estos canales se solapan entre sí, lo cual puede producir interferencias. Para evitar interferencias por usar el mismo canal u otros adyacentes, utiliza los canales 1, 6 y 11, que no se solapan.
Importante: La cobertura inalámbrica debe abarcar toda el área de trabajo. Si se utilizan dispositivos antiguos, es imprescindible que el plan de diseño incluya las dos bandas Wi-Fi, tanto la de 2,4 GHz correspondiente al estándar 802.11b/g/n/ax como la de 5 GHz correspondiente al estándar 802.11a/n/ac/ax.
Sé prudente a la hora de diseñar las redes; se recomienda que entiendas la forma en que los dispositivos Apple buscan una conexión mejor:
Debes saber cuál es el umbral de activación de los dispositivos Apple: El umbral de activación es el nivel de la señal (en decibelios referidos a un milivatio) en el que un cliente empieza a buscar una conexión mejor. Los ordenadores Mac utilizan el nivel de activación de –75 dBm, mientras que el de los dispositivos iPhone y iPad es de –70 dBm. Por lo tanto, si diseñas celdas de 5 GB con una superposición de -67 dBm, por ejemplo, los dispositivos se mantienen conectados al identificador del conjunto básico de servicio (BSSID) actual durante más tiempo del que esperas. Cuando se cruza el umbral, los dispositivos comienzan a realizar una búsqueda con el fin de encontrar los BSSID del candidato de la itinerancia para el nombre identificador de la red inalámbrica (ESSID) actual.
Debes saber cómo ven los dispositivos iPhone y iPad los límites de celdas: Las antenas de un ordenador portátil son mucho más grandes y potentes que las de un smartphone o una tablet, por eso los dispositivos iPhone y iPad contemplan límites de celdas diferentes a lo esperado. La mejor opción siempre es realizar la medición con el dispositivo de destino.
Conseguir una buena capacidad Wi-Fi
A la hora de diseñar tu red Wi-Fi, debes tener en cuenta el patrón previsto de utilización de dispositivos Apple.
La mayoría de los puntos de acceso de gama empresarial modernos pueden admitir hasta 50 clientes Wi-Fi o incluso más (aunque, si todos esos dispositivos usan un único punto de acceso 802.11n, la experiencia de los usuarios seguramente será decepcionante). La experiencia de cada usuario depende del ancho de banda disponible de la red inalámbrica en el canal que esté utilizando el dispositivo y del número de dispositivos que compartan ese ancho de banda. Cuantos más dispositivos utilicen el mismo canal, más disminuirá la velocidad relativa de la red para esos dispositivos.
Por ejemplo, supongamos un colegio con 1100 estudiantes y 30 profesores en un edificio de dos plantas. Cada estudiante tiene un iPad y cada profesor, un MacBook Pro y un iPad. Cada aula alberga unos 36 estudiantes y son contiguas. A lo largo del día, los estudiantes investigan por internet, ven vídeos educativos e intercambian copias de archivos en un servidor de archivos, en la red de área local (LAN).
En este caso se requeriría un diseño de la red Wi-Fi relativamente complejo. Para dar servicio a un número tan elevado de dispositivos en cada aula podría hacer falta un punto de acceso por aula. En las zonas comunes, el número de puntos de acceso debería determinarse en función de la densidad de dispositivos Wi-Fi que haya en esos espacios.
Consejo: Antes de llevar a cabo la instalación, realiza una evaluación de la instalación Wi-Fi (“site survey”) para determinar el número exacto de puntos de acceso necesarios y su disposición. La evaluación de la instalación Wi-Fi también debería determinar la configuración adecuada de la potencia de cada canal de radio de punto de acceso. Tras la instalación de la red Wi-Fi, realiza otro estudio del sitio para comprobar que el entorno Wi-Fi es adecuado. Por ejemplo, en el caso de una red diseñada para admitir un gran número de conexiones en un edificio, lo más conveniente sería validar el diseño con personas dentro del edificio porque la gente absorbe las señales de radiofrecuencia (RF). Si las puertas de las aulas están cerradas durante el uso de la red, dichas puertas también deben estar cerradas cuando valides el diseño.
Hardware y multidifusión
Conviene que los puntos de acceso y demás equipos de hardware de la infraestructura Wi-Fi tengan la misma capacidad y funciones habilitadas para que los usuarios disfruten de una conexión Wi-Fi lo más uniforme posible. Por ejemplo, una red 802.11ac debe configurarse coherentemente en todos los puntos de acceso, en lugar de que algunos puntos de acceso estén configurados para 802.11n con el mismo nombre de red. La arquitectura de red de Bonjour, que no necesita configuración, es compatible con la publicación y detección de servicios en una red de área local o de área ancha. Bonjour debe estar activado en la red siempre que se quiera acceder a apps y servicios de Apple, como Aula, AirPlay y AirPrint.