La boda de Gabriela e Íñigo fue tan especial como lo son ellos. Fue durante la noche de San Juan; querían algo que estuviera ligado a la naturaleza y, dicho y hecho: “Elegimos la ermita de la Virgen de la Adrada. Rural, sencilla, pero, a su vez, especial, en medio de la naturaleza, que consideramos que nos representa”, nos cuenta Gabriela. Para el gran día, la novia confió en las manos de From Lista with Love: “¡Son la bomba! Los echo mucho de menos. Realmente se vuelcan en conseguir lo que tú quieres. Sigo buscando excusas para volver a hacerme algo con ellos”. Tras la ceremonia, el convite continúo en Finca las Margas, en el campo, rodeada de vegetación y que permitió alojarse a los padres y hermanos de ambos para vivir cada instante de la emoción de la boda: “Nos encantó desayunar todos juntos al día siguiente y comentar la boda”.
1. El vestido
“Mis amigas dicen que es ‘muy yo’. Vaporoso, falda con movimiento, entallado por arriba, sencillo, elegante”, así describe Gabriela su vestido de novia, de From Lista With Love.
2. Las flores
“Mi ramo me lo hizo Aquilea Flores. Me inspiré en el ramo de mi madre y mi tía María. Ellas cogieron muy bien la idea, y lo actualizaron.”
3. La historia de amor
“Nos conocimos en la universidad y, después de más de 10 años de relación, decidimos casarnos en Segovia, ya que es la ciudad donde empezó todo y, por tanto, le tenemos especial cariño”.
4. El catering
El padrino de Gabriela es socio de Ciboulette Catering, así que no dudaron en a quién confiarle la parte gastro de la boda: “Ver la cara de tranquilidad de mis padres y mis suegros contribuye a toda esta felicidad”.