Sabes que puedes acabar... ¿en la cárcel de LinkedIn?

¿Has oído hablar de la "jail" de #LinkedIn? Pues si, cuando lo menciono en mis clases, hay quién aún no se lo cree, pero... ¡existe!. Y curiosamente, ese "desconocimiento" lo vimos nuevamente reflejado en la encuesta que publicamos sobre el tema hace unos días y, en la cual, si has participado, te lo agradecemos desde estas líneas 😊

Ya lo ves, un 65% de las respuestas dejan claro que no conocían su existencia. Sinceramente, me parece positivo que así sea, porque es una manera de ayudar a preservar que tod@s hagamos un buen uso de la plataforma.

Pero bueno, como en toda comunidad, en este caso, de profesionales (pero vamos.... ¡piensa en tu comunidad de vecinos.... o no! No se yo si quiero cambiarte tu energía en el día de hoy... 😉), necesitamos un "hermano mayor" que vigile un poco que todos vamos en el mismo camino y respetando las normas más básicas de convivencia.

Eso si, y es una opinión personal y de experiencia propia, a veces hay algún comportamiento que, vamos a decirle, "confunde al algoritmo" con el que no estoy de acuerdo y luego lo comentamos.

Es decir, el "todo vale", afortunadamente, no sirve en LinkedIn. Y para ello, las políticas utilizadas se basan en estos 3 criterios principales:

Vale, vale, pero... ¿puedes explicar cuáles son los principales motivos por los cuáles #LinkedIn se "puede enfadar?. Hay muchos, pero por mencionar algunos...

• El uso de herramientas de automatización (softwares de terceros) que visitan perfiles por ti, que pueden llegar a encontrar el correo electrónico de los contactos aún no estando visible o estando conectad@s. Pero bueno, alguien me dirá, ¡yo los uso y no me pasado nada!. Puede ser... pero si el algoritmo los detecta, tienes muchos puntos para acabar en la jail. De hecho, hay una gran lista publicada de las herramientas externas más "perseguidas"..

• Intentar publicar contenido ofensivo y/o abusivo. Pero... ¿cómo lo detecta? ¿enseguida que le doy a publicar... aparece en el muro, no? Pues no, cómo se explica en las normas y políticas de la comunidad (ayyyy... que no me las he leído, ya, suele pasar😉, aunque lógicamente eso no nos exime), tu contenido pasará por diferentes capas de seguridad. De hecho, por 3 capas, en las cuáles intervienen desde la inteligencia artificial a la revisión humana. Os parecerá una tontería (o no), pero para ello es muy importante también tener contraseñas seguras y que nadie conozca. Ni os digo las respuestas que obtengo en las encuestas de mis formaciones y ya, ya sé que es difícil recordarlas, pero he tenido casos en el despacho de, vamos a llamarle, "divorcios difíciles y contraseñas compartidas" que, bueno, han llevado incluso al doxing.... 🙁

• Enviar invitaciones saltándose la "restricción histórica" de la plataforma. ¿Qué quieres decir? Ya sabes que hay unos límites numéricos a la semana. Perooooo... es que además, los más veteranos recordarán que en los primeros tiempos, #LinkedIn quería que conectaras primero con personas que realmente conocieras. Pues bueno, aunque eso actualmente no se mantiene, las personas invitadas pueden simplemente ignorar tu invitación o añadir "No conozco a esa persona". Si muchos lo hacen así, vas a ver que es un aviso que mejor no lo sigas haciendo....

• Perfiles con información falsa o engañosa en cualquier apartado. ¿Pero hay alguien que lo hace? Ummmm.... pues si. Simplemente un dato, la foto. #LinkedIn tiene claro que fotografías de perfil no admite. Para empezar, y más allá de cómo debe ser, que eso puede dar para otro artículo, se te tiene que reconocer. Y aunque incluso admite caricaturas, dibujos y representaciones artísticas, no admite...

• Y os lo decía antes, el visitar muchos perfiles en un corto periodo de tiempo, aunque se desconoce, también puede hacerte acabar en la jail de LinkedIn. Bueno hasta cierto punto, lo puedo entender, porque el algoritmo puede estar viendo síntomas de cierta automatización. ¡A mi me pasó! Y aunque he leído que si eres premium, no pasa.... pues si pasa. Y acabé una noche en la cárcel! En lo que no estoy de acuerdo y lo reporté, aunque sin éxito, es que mis visitas continuadas eran a perfiles de mi red (1er grado). Si ya son mis contactos... no veo el problema. La respuesta fue que el algoritmo no diferencia por grados 😱

En fin, y si acabo en la cárcel... ¿qué hago? ¿Voy encargando el bocadillo con la lima dentro? ¿Trazando un plan para escapar lo antes posible? Pues.....

... sólo te queda tener paciencia y dependiendo de la infracción, mucha paciencia. El bloqueo / castigo puede ser sólo de horas (si es leve), de días, de meses o incluso definitivo. Así pues, quizás mejor "no cometer infracciones", porque cómo decíamos no conocerlo, no nos exime de no cumplirlo.

¿Conoces algún otro motivo por el cual tu perfil pueda acabar en la cárcel de #LinkedIn? ¿Te ha pasado a ti en primera persona? ¿Nos lo dejas en comentarios y así seguimos aprendiendo entre tod@s? 😊

A través de este newsletter #ConsejosLinkedInRosaura tod@s aprendemos de tod@s. Asi pues, si tienes ganas de compartir, y es la primera vez que "caes por aquí", te invitamos a SUSCRIBIRTE y UNIRTE a nuestra creciente comunidad de más de... ¡7.100 profesionales!